En el denominado ‘Matinal de Chiqui’, los panelistas del Muy buenos días, revelaron las más insólitas locuras que habían hecho por amor.

Fue precisamente la comediante quien comenzó señalando que ella y su marido se hicieron el mismo tatuaje que dice ‘estaba escrito’ en árabe.

En ese contexto, Cristián Sánchez también contó que él se tatuó ‘Diana’ en la espalda, ante la incredulidad de sus compañeros, agregando que se lo hizo durante un viaje a Australia, sin embargo, nunca lo mostró.

Por su parte, Ignacio Gutiérrez contó que también se hizo un tatuaje, aunque no cuando estaba en pareja, sino una vez que había superado la tristeza de una ruptura. Chiqui le preguntó cuándo se había dado cuenta que lo había superado, a lo que el animador contestó que cuando se enamoró nuevamente.

Hugo Valencia fue quien continuó contando su experiencia: “Yo hace un tiempo, tuve una relación, ustedes ya saben, una relación que ha ido y venido, con altos y bajos. Hace un par de meses atrás me regalaron un anillo, adquirimos un compromiso, en una cosa que fue súper bonita, nunca lo había hecho”.

Pero eso no fue todo, ya que además reconoció que tiene una relación complicada y que muchas veces se confunde porque no sabe si es amor de pareja, de amigos o una amistad. “A mí me sorprendió porque siempre vamos al cerro en bicicleta y me llevó al Mirador Pablo Neruda que yo no lo conocía, y ahí abre su banano y sacó dos cajitas y era un anillo y me lo regaló y yo me lo puse, porque sentí que era un compromiso”, reveló.

Añadió también que no significaba que se iban a casar, pero sí era para recordar el cariño que se tenían: “Me dijo, ‘yo quiero que me recuerdes cada vez que mires el anillo'”.

“Después cuando yo estaba con otra persona yo me sentía infiel y yo no estaba cometiendo ninguna infidelidad, porque las cosas estaban súper claras, era por el anillo, pero sentía que no correspondía, me sentía faltándole el respeto a él y a mí también, con mis sentimientos”, confesó.

Finalmente optó por sacarse el anillo y volver a guardarlo en la misma cajita en que se lo regalaron. Pero no fue fácil, porque al momento de sacárselo sufrió por darle fin a una historia.