Mientras en Fiestas Patrias todos los chilenos celebraban, Kathy Contreras se encontraba en un retiro en el que debía estar completamente en silencio, esto debido a que ingresó a un programa en el que pasaba gran parte del día meditando.

“¿Tú viste la película Comer, rezar, amar? Bueno, ahí fue donde aprendí el concepto de Vipassana y me puse a investigar”, fue lo comentado por la ex chica reality al diario Las Últimas Noticias, donde contó que decidió participar de un retiro de 10 días (entre el 16 y el 27 de septiembre), donde debía meditar por 10 horas diarias, sin hablar, ni mirar a ninguno de sus compañeros.

“Es cuático estar en un ambiente de silencio por nueve días, en occidente no estamos acostumbrados a eso. Yo sólo hablé dos veces en ese periodo para hacerle preguntas a mi profesora. Necesitaba saber si lo que estaba sintiendo estaba encaminado con la técnica”, comentó Kathy luego de haber pasado por este intenso proceso en un centro de Putaendo.

Si bien fue en la película protagonizada por Julia Roberts que la participante de Calle 7 aprendió del concepto de Vipassana, que es un proceso de autopurificación mediante la autoobservación, el motivo principal por el que se inscribió en este retiro fue porque siente un apego exagerado con sus parejas, situación que está relacionada con la aparición de su padre biológico en 2014.

“Hace cuatro meses estoy en una relación y para mí, con las parejas uno siempre está buscando al padre, entonces noté que nuevamente estaba formado un gran apego. No estaba siendo totalmente sano, porque ambos empezamos a ver conductas posesivas. Por suerte no alcanzamos a pelear”, confesó Contreras.

Fue por este motivo que la modelo decidió mantenerse en silencio por 9 días, para así corregir estos eventos en su vida: “Mi gran miedo era que la mente me traicionara y me pusiera a pensar que mi pololo estaba haciendo algo. Pero este era mi proceso, ¿cómo lo iba a dejar botado? Hay muchas personas que se postergan por miedo a que las parejas las abandonen. Fue súper difícil. Este fue el verdadero reality de mi vida”, aseguró.

Pero no tan sólo su actual relación le preocupa a Kathy, sino también un conflicto que tiene con su madre: “Hay una capa que quiero sacar que es el desapego, porque yo aún vivo con ella. He tenido todas las herramientas para vivir sola pero tuve caídas, fracasé, administré mal las lucas. Ya no quiero depender totalmente de que mi techo también es el de mi mamá”, concluyó.