La mañana de este domingo, en el marco de las elecciones presidenciales, causó gran preocupación el caso de un adulto mayor de 85 años que no pudo ejercer su derecho a voto, puesto que su hija le habría robado su cédula de identidad.

El hecho fue reportado por T13.cl, donde indicaron que el votante, identificado como Sergio Farías, llegó hasta su mesa en el Colegio Carmela Silva Donoso, en la comuna de Ñuñoa, con un carnet vencido desde hace más de 15 años que no se lo aceptaron.

Cabe mencionar que el hombre arribó hasta el recinto a bordo de una silla de ruedas y con la ayuda de sus vecinos, quienes lo trasladaron ante su insistencia de cumplir con su labor cívica.

Así, al llegar al local denunció que su hija le habría quitado su cédula de identidad vigente para impedir que votara y se presentó con un carnet vencido en 2010.

Sin embargo, pese a explicar lo ocurrido, las autoridades del local le negaron la posibilidad de votar, debido a que el documento no solo se encontraba vencido desde hace más de una década, sino que además correspondía a un modelo de cédula descontinuado por el Registro Civil desde 2002.

Así, tras ser informado de que no podría votar, el adulto mayor regresó junto a sus vecinos a su domicilio, para solicitarle nuevamente a su hija la entrega de su carnet vigente.

No obstante, según relataron, la mujer se negó otra vez a entregarlo, pero finalmente, después de varios minutos, lograron que se lo entregara.

De esta forma, a eso de las 14.30 horas, Sergio Farías, de 85 años, pudo sufragar al llegar nuevamente a su local de votación en Ñuñoa, esta vez con su cédula identidad vigente.

Cabe recordar que la normativa electoral permite votar con carnet de identidad o pasaporte vencido, siempre que el documento no tenga una fecha de expiración superior a un año antes de la elección, es decir, no anterior al 14 de diciembre de 2024.

Lipigas ingresó una denuncia online en la Fiscalía Oriente por el delito de sabotaje informático, tras el polémico llamado explícito a votar por José Antonio Kast.

La Fiscalía trabajará en la investigación de los hechos con la Brigada del Cibercrimen de la Policía de Investigaciones (PDI).

A través de un comunicado, explicaron cómo ocurrió la emergencia y de qué manera se pudo contener.

Según indicaron, durante la madrugada se detectó un acceso no autorizado a la plataforma de mensajería Onesignal, que controla los mensajes y notificaciones.

"A través de la aplicación, terceros mandaron un mensaje ajeno a la compañía sobre las elecciones de hoy, con un llamado a votar por uno de los candidatos presidenciales", señalaron.

Recordemos que a través de la aplicación móvil de la compañía se envió un mensaje que sorprendió a los usuarios.

Una fiscalización terminó revelando un hallazgo inédito en el puerto de San Antonio. Personal del Servicio Nacional de Aduanas incautó cerca de dos toneladas de vainillas y casquillos de municiones de distintos calibres, los que se encontraban ocultos en sacos que habían sido declarados como desechos de cobre destinados a exportación.

El procedimiento se desarrolló en el marco del trabajo de análisis y control que realiza Aduanas en la zona, enfocado principalmente en detectar cobre de ilícita procedencia, considerando el aumento sostenido del robo de cables y tendido eléctrico a nivel nacional.

Sobre el operativo se refirió la jefa de Fiscalización de la Aduana de San Antonio, Natalia Garay, quien actualmente subroga al director regional, Angelo Vergara, consignó BioBioChile.

"La mercancía venía declarada en la exportación como desperdicios y desechos de cobre. Procedimos a seleccionar este contenedor y aperturarlo para realizar el desconsolidado y la respectiva inspección física de las mercancías para dar cuenta de que lo declarado cuadraba con la mercancía realmente presentada para el embarque", detalló.

Fue durante esa inspección cuando el equipo fiscalizador advirtió que el contenido no correspondía únicamente a chatarra metálica.

"Nos damos cuenta de que no se trataba de solamente desperdicio y desechos de cobre, sino que de una serie de maxi sacos que contenían, además de chatarra metálica, estas vainas y casquillos de municiones en otros maxi sacos que venían de manera oculta", precisó Garay.

La autoridad subrayó la gravedad del caso, destacando que se trató de un intento deliberado por simular una exportación a través del Puerto de San Antonio.

"Esta incautación reviste especial interés debido a que esta mercancía trató de ser exportada por Puerto San Antonio, simulando una exportación de desperdicio y desechos de cobre", enfatizó.

En esa línea, la jefa de fiscalización recalcó que el trabajo del servicio se ha intensificado en este tipo de operaciones, considerando el contexto delictual asociado al robo de cobre.