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La Municipalidad de La Florida demolió la animita en honor a Juan Chandía, conocido como el "Santo de los ladrones de autos", ubicada en Ancud con Santa Raquel. Delincuentes acudían al altar para pedir protección antes de cometer ilícitos, dejando llaves de autos como ofrenda. El alcalde Daniel Reyes explicó que la acción busca devolver la tranquilidad a los vecinos afectados por el clan familiar del joven fallecido en un robo a un carabinero en 2024. Subsecuentemente, allanamientos llevaron a la detención de la madre y el hermano del difunto.
Durante la jornada de este miércoles, la Municipalidad de La Florida llevó a cabo la demolición de la animita que recordaba a Juan Chandía, un adolescente de 16 años que se hizo conocido como el 'Santo de los ladrones de autos'.
El pequeño altar se encontraba en la esquina de Ancud con Santa Raquel y se había transformado en un punto de reunión para delincuentes del sector, quienes acudían al lugar para rendirle culto y pedir protección antes de cometer ilícitos.
De acuerdo a antecedentes policiales, los compañeros de delito del joven solían dejar llaves de vehículos y otros objetos como ofrenda, en agradecimiento por presunta “protección espiritual”.
El alcalde de La Florida, Daniel Reyes, explicó que el retiro del memorial busca devolver la tranquilidad a los vecinos.
“Estamos hablando de un clan familiar que durante muchos años generó una afectación muy importante a vecinos del sector, que vivían con miedo”, señaló.
¿Quién era el 'Santo de los ladrones de autos'?
Según consignó 24 Horas, Johan Chandía fue abatido el 12 de junio de 2024, cuando participaba junto a otros tres sujetos en el robo a un carabinero.
Tras su muerte, su abuela mantenía la animita y solía defender el homenaje. “Es tan simple. Aquí llegan a dejarle todo al pequeño Johan”, expresó en su momento.
“A él le gustaban los autos, tiene hasta una rueda de auto. Tiene puros autos pequeños. Me lo mataron a los 16 años”, añadió.
Cabe señalar que allanamientos e investigaciones posteriores permitieron detener a la madre y el hermano del joven, quienes también tenían antecedentes policiales.





