Cuando tenía solo tres meses, Madison Santibáñez fue diagnosticada con una inmunodeficiencia combinada por mutación DOCK2, una enfermedad a la sangre.
Siendo tan pequeña, se sometía a varios tratamientos en el Hospital San Pablo de Coquimbo. Ya era la única persona en Chile con esa enfermedad y su única opción para sobrevivir era encontrar a un donante 100% compatible.
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La Fundación DKMS ha realizado varias campañas de registros en el norte de Chile para encontrar a su potencial donante de células madre sanguíneas.
Luego de tres años de búsquedas, y gracias a la solidaridad de cientos de personas, Madison encontró a su hermano de sangre.
“Gracias a DKMS hemos aprendido de la importancia de un trasplante y la urgencia de buscar un donante compatible. Como familia siempre tenemos el temor que el trasplante pueda no funcionar, pero entendemos que si el trasplante es la mejor opción para ella, hay que hacerlo”, dice su madre, Geraly Valdivia.
“Nosotros seguimos todo lo que nos dicen los doctores y queremos lo mejor para ella siempre”, agregó.
Otros pacientes que buscan a un ‘gemelo genético’
Aunque en la Fundación celebran las posibilidades que hoy tiene Madison, también saben que muchos pacientes todavía necesitan apoyo para encontrar a su potencial donante.
Muchos, como Madison, no encuentran a alguien compatible dentro de su familia, por lo que necesitan a donantes no emparentados.
“Por azar genético, es posible encontrar a personas no emparentadas que comparten características de compatibilidad o, como nosotros los llamamos, ‘gemelos genéticos'”, explica Ignacia Patillo, directora ejecutiva de DKMS Chile.
“Mientras más personas estén registradas en DKMS, la probabilidad de encontrar a un donante compatible con un paciente aumenta. Cada persona es una nueva posibilidad”, añade.
Actualmente, DKMS está en campaña para encontrar a potenciales donantes para distintos pacientes, incluyendo a Tomás, niño de 6 años, de Puerto Montt; Vicente, de 9 años y que vive en Osorno; Fabián, de 2 años, Alonso, de 6 y Maciel, de 8.
