Ducharse es para muchos una rutina diaria, pero si alguna vez sucumbiste ante la tentación de saltarte estos minutos de aseo para dormir un poco más, probablemente deberías tomarlo en cuenta para una próxima vez que te baje ese deseo.
Y es que de acuerdo a un artículo publicado en el blog TwentyTwoWords, hay varias ‘cosas’ asquerosas que pueden pasarle a tu cuerpo si no te duchas en dos días. El primer problema se debe a las bacterias.
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Los humanos cargamos con alrededor de mil tipos de bacterias, incluyendo 40 tipos de hongos, de acuerdo al sitio. Mientras la mayoría de estas son beneficiosas, necesitan ayuda del jabón para pelear contra las bacterias perjudiciales, lo que no se puede conseguir si no te duchas. “Y si estas bacterias ‘malas’ encuentran el camino a tus ojos, nariz o boca, podrías enfermarte“, indica.
Las bacterias también son la causa del olor corporal. De hecho, los gases emitidos producto de estas bacterias pueden acarrear alrededor de 30 malos olores de tu cuerpo. ¿No es muy lindo, cierto?

Y como si eso no fuera suficiente para que te tomes en serio la ducha, existe otra gran razón para mantenerse limpio, pues es vital para la salud de nuestra piel. La ducha ayuda a mantener la piel libre de aceites que contribuyen a la acumulación de imperfecciones, y esto es particularmente importante si eres de las personas que trabaja regularmente.
Holly L. Phillips, médico especialista en salud femenina, señala: “El sudor que botamos y que se impregna en la ropa llegando incluso a humedecerla por un largo tiempo, conduce a la irritación y al aumento de pequeñas abrasiones o al deterioro de la piel“, y agrega: “Esto puede aumentar el riesgo de infecciones bacterianas y fúngicas, como la bacteria estafilococo o el hongo que causa la tiña inguinal“.
En este contexto, Phillips indica que si realmente debes saltarte una ducha, lo ideal es cambiarte la ropa si es que sudas mucho y mantener las zonas como axilas, ingle y cara siempre limpias, pues son áreas que atraen fácilmente bacterias.
Por último, aquellos fanáticos de las duchas largas tampoco pueden ‘cantar victoria’, pues esto no le hace nada bien a su piel. Pasar demasiado tiempo bajo el agua elimina los aceites esenciales de su cuerpo, lo que puede dejar tu piel con una sensación seca y escamosa.