Aránguiz lanzó ácido comentario sobre limpieza en El Discípulo de Chef: "No se lavan ni las manos"

Daniela Aránguiz ha mostrado que tiene un carácter bastante fuerte en El Discípulo del Chef, tanto así que ya tuvo algunos conflictos con sus compañeros, sobre todo por la limpieza.

De hecho, la decoradora hace algunas semanas aseguró que le da mucha atención a este punto, a tal nivel que llevó sus propios artículos para asear algunas zonas de la cocina del programa de Chilevisión.

“Tengo mi pinza, que no me gusta que use nadie. También tengo mi escobilla de uñas, que es muy importante; un gorrito para amarrar mi pelo… y un labial”, expresó en ese entonces, al comentar que no se considera mandona, sino que es maniática de la limpieza.

En ese sentido, este lunes Daniela reposteó unas historias de Instagram de su maquillador donde se le ve aseando el lugar de trabajo del artista, mientras él sostiene detrás que Aránguiz se comportaba igual en todos lados.

Lo anterior, motivó a que la participante de El Discípulo de Chef lanzara un ácido comentario hacia algunos compañeros del programa, haciendo alusión al punto de la limpieza.

“Hay que ser limpiecita hueón, porque imagínate las cochinas. Yo conozco a tantas cochinas que no se lavan ni las manos para cocinar en el programa que estoy. Con eso les digo todo”, expresó.

A ello, añadió que pese a que no cumplían ciertas normas de higiene “después se hacen las ofendidas”, para cerrar entre risas.

Daniela Aránguiz y conflicto con Perla Ilich

Cabe señalar, que el último conflicto que tuvo Aránguiz en pantalla fue con Perla Ilich, luego de que la gitana se llevara supuestamente una cuchara a la boca para posteriormente volver a dejarla al interior de la comida, lo que molestó a la esposa del Mago Valdivia.

Eso sí, ambas participantes aclararon al día siguiente del episodio que habían conversado sus diferencias, por lo que no había ningún problema.

Sin embargo, las imágenes le dieron la razón a Perla, ya que se ve claramente que sacó una cuchara limpia y no sucia como pensó Aránguiz.