Conmoción nacional ha causado el caso de asesinato de dos hermanos de la comuna de El Bosque cuyo supuesto responsable continúa prófugo.

El principal sospechoso es un hombre de 29 años de nombre Fernando, guardia de seguridad y colega de la mamá de las víctimas, quien incluso lo acogió en su casa al saber que no tenía un lugar donde vivir.

Las dudas respecto a su responsabilidad nacen a raíz que el hombre no se presentara a trabajar el día lunes y abandonara la vivienda con todas sus cosas personales.

En un despacho del matinal Bienvenidos el día miércoles, se recibió un llamado de un hombre llamado Jaime Quezada, quien ntregó un importante testimonio respecto a Fernando.

Jaime contó que el 2019 conoció a este sujeto, y lo acogió en su hogar arrendándole una habitación, pues al igual que a la madre de las víctimas, se compadeció porque -según él- no tenía dónde vivir. “Él era como un amigo de mi hija, le dijo que no tenía dónde vivir, que lo habían echado, que no tenía donde llegar, entonces nosotros como familia lo acogimos“, partió diciendo.

Fernando se quedó con ellos hasta febrero del 2020 y si bien al comienzo parecía una persona tranquila, con el paso del tiempo Jaime empezó a notar comportamientos un tanto extraños que culminaron con un intento de abuso contra una hija.

Y este jueves fue la propia hija de Jaime, Camila Quezada, quien conversó desde la comuna de El Tabo con el matinal de Canal 13, para contar su dura experiencia con el sindicado como único responsable del asesinato de Rubén y Catalina.

Todo comenzó hace muchos años atrás, llegó con la misma faceta. Simpático, respetuoso, caballero, trabajador y muy humilde. Para el estallido social vino a mi casa con la misma historia, que la mamá lo había echado, que no tenía dónde vivir y nosotros de buena persona para no dejarlo en la calle lo recibimos en la casa, aparte que igual era amistad mía”, partió relatando la joven.

Con el paso del tiempo, ella también comenzó a notar un cambio en la actitud de Fernando y un acoso constante que todavía no se traducía en un intento de abuso sexual. “Pasaron las semanas y aparecieron conductas extrañas en él, se empezaron a notar algunas obsesiones hacia mi persona, sus celos hacia mi familia porque pasaba tiempo conmigo, incluso hasta de mi pareja. Empezó a meterse a mi pieza y yo tenía que echarlo”, agregó.

hermanos de el bosque
Captura | Canal 13

La situación fue empeorando puesto que él empezó a actuar más violentamente y a poner “malas caras”, Camila también comentó que “a veces se levantaba de malas y no hacía nada y ahí se empezaron a generar conflictos, además que solamente quería estar conmigo“, dijo.

Intento de abuso sexual

El padre de la joven había relatado anteriormente el intento de abuso sexual que cometió el hombre en contra de su hija, y esta vez fue ella quien detalló que fue una noche en la que él entró a su habitación con claras intenciones de agredirla.

Se metió en mi pieza, se tiró encima mío, yo lo empujé, llamé a mi papá y ahí se terminó todo contacto con él“, aseguró.

Claro que eso solo duraría un tiempo, pues después comenzó una especie de acoso telefónico y por redes sociales hacia ella y su familia. “Las llamadas de numeros desconocidos, acoso por redes sociales, hubo un tiempo que tuve que cerrar mi Instagram, Facebook, dejar de lado mi vida, hasta que un día dije ‘no’ e hicimos las denuncias correspondientes, pedimos una orden de alejamiento, mostré todas las pruebas necesarias pero la justicia no hizo nada”, aseguró.

Consultada respecto a cómo lo conoció, Camila señaló que fue a los 17 años, y que Fernando era hermanastro de una amiga que tiene hasta la fecha, y con el tiempo supo que ella también vivió cosas similares con este hombre, pese a que eran hermanastros.

Cabe señalar que según Bienvenidos, el hombre tiene en su expediente policial una acusación de abuso sexual en marzo de este año, donde figuraría como imputado, según antecedentes de la Fiscalía Metropolitana Centro Norte.