Lisa Milburn (32) de la capital de Escocia logró perder unos 127 kilos, sin embargo, su miedo a volver a subirlos la hizo caer en un desorden alimenticio que le costó mucho salir.

De acuerdo a Daily Mail, la joven se volvió totalmente obsesionada con perder peso, logrando bajar varios kilos en solo tres años, de hecho, fue tanto que llegaba a pesarse ocho veces en tan solo un día.

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Luego de perder más de cien kilos, la joven comenzó a sobrevivir con una dieta que consistía en tan solo 300 calorías llegando a pesar solo 48 kilos, un peso bastante bajo para su cuerpo, ya que la joven mide un metro y setenta centímetros. Debido a esto, fue diagnosticada de anorexia atípica.

Fue un momento bastante tenebroso en mi vida porque fui de un extremo a otro, llevando mi pérdida de peso demasiado lejos. Comenzó por convertirse en una obsesión y me encantaba ver cómo cada vez que me pesaba los números bajaban. Ahora quiero mostrarle a la gente que aunque he perdido peso igual puedo lucir maravillosa“, comentó Milburn al diario británico.

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Y es que la joven también confesó que desde muy pequeña que tenía problemas con su peso. Por ejemplo, cuando tenía 20 años pesaba unos 187 kilos. “Las tres comidas para mí no eran suficientes, comía muchas hamburguesas y snacks, seguida de muchos chocolates, y por alguna extraña razón mi peso no me molestaba“, señaló.

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Sin embargo, todo cambió cuando vio un documental sobre la obesidad. “Estaba tan impresionada después de ver los problemas de esas personas. Fue ahí cuando me di cuenta de que si seguía comiendo así terminaría tal como en el documental. El miedo me hizo bajar de peso“, agregó.

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Lisa se unió a un grupo de Escocia para bajar de peso, además, comenzó a comer más saludable y a nadar cuatro veces por semana. Después de tres años bajó 120 kilos. “Me sentía fantástica y me dio mucha confianza en mí misma“, dijo. Sin embargo, una nueva pesadilla estaba por comenzar, ya que siguió y siguió bajando de peso hasta llegar a ser anoréxica.

Pero gracias a un tratamiento con especialistas, la joven de Escocia logró dejar atrás sus desórdenes alimenticios y actualmente está con un peso saludable de 69 kilos para su cuerpo. “Fue muy dificil en un principio, pero yo sabía que tenía que estar mejor. Por eso comencé a comer las tres comidas de nuevo. Ahora que estoy saludable, jamás me permitiré que algo así me pase de nuevo“, finalizó.

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