A 12 años de cárcel fue sentenciado Christopher Wayne Edwards, un enfermizo hombre que drogó, abusó y violó a su propia hija durante más de 2 años.

El sujeto es el padre biológico de Emma Burt, una bella joven que actualmente tiene 19 años. Edwards se refería a ella como su esposa y abusó de ella prácticamente desde que cumplió 15 años.

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Según consignó Mirror, en 2012 y tras una fuerte discusión con su madre Emma se mudó con Christopher, sin jamás imaginar que la pesadilla comenzaría poco después de un mes.

En principio la drogaba con marihuana hasta llevarla a la inconsciencia para poder abusar de ella. Luego pasó a sustancias más poderosas como la cocaína y las metanfetaminas. Para cuando Emma pudo escapar ya era adicta. Asegura que el hombre la violaba a diario y además, el tribunal, confirmó que el sujeto además tomaba y almacenaba fotografías indecentes de la chica, que en ese entonces además era menor de edad.

“Entró y salió de mi vida por varios años, pero cuando cumplí 15 años me mudé con él y el abuso empezó alrededor de un mes después. En los primeros dos meses él nunca hablaba de cómo me violaba. Sólo esperaba a que me comenzara a quedar dormida y ahí venían las drogas. Pero después de los tres meses comenzó a contar todo. Él me llamaba como en broma su esposa. Pero era prácticamente una esposa”, recuerda la joven que hoy es madre de un bebé y logró vencer la adicción a las drogas con el apoyo de su familia materna.

“Llegó a un punto en que era dependiente de las drogas. No entendía nada de lo que pasaba, estaba demasiado drogada. Ser tan adicta causó problemas cuando escapé, nunca le dije a nadie, pero las personas empezaron a notar que estaba rara, diferente”, relató la mujer residente de la ciudad de Powys, en Gales.

En diciembre de 2014 poco antes de escapar incluso intentó atentar contra su vida, saltando de un puente, fue ahí cuando se dio cuenta de que era momento de hablar y en un reunión familiar se quebró. Ellos llamaron a la policía y la historia comenzó a cambiar.

Una vez formalizada la investigación en tribunales, Edwards se declaró culpable de violación, cuatro cargos de actividad sexual con una menor de edad, producción y posesión de fotografías indecentes, posesión de drogas y suministro ilegal de drogas a una menor de edad.

El Juez Niclas Parry dijo al tribunal : “Ella se convirtió totalmente dependiente de las drogas y usted (Edwards) utilizó aquello para facilitar los delitos sexuales y tomar las terribles imágenes”.