Desde que Amber Graces y su novio Chris decidieron irse a vivir solos a Melbourne, Australia, quisieron comenzar su propia familia juntos, sin embargo, después de un año de intentarlo sin buenos resultados, supieron que algo malo estaba pasando.
En ese momento, la joven fue al médico para someterse a algunos exámenes, los que finalmente arrojaron que tenía un quiste de siete centímetros en uno de sus ovarios, lo que estaba provocando además la ausencia de su menstruación, por lo que se debía extirpar lo antes posible.
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“Recuerdo que cuando me lo dijeron yo lloraba y preguntaba ‘¿por qué no podía tener un hijo?“, dijo Amber bastante angustiada al diario australiano House of White.
Las palabras del doctor tranquilizaron a la australiana, quien pensó que una vez que la cirugía finalizara quedaría embarazada, pero lamentablemente la historia no fue así, ya que las malas noticias siguieron.
Un nuevo quiste apareció en su cuerpo, esta vez en una de las trompas de falopio, por lo que los doctores le recomendaron extirparlo junto al órgano para asegurarse de que no volviera a aparecer nuevamente.
Además, uno de los exámenes evidenció que efectivamente, Amber no podía quedar embarazada porque ninguno de sus ovarios funcionaba, por ello una de las últimas opciones para lograr quedar embarazada sería que su hermana le donara sus óvulos para realizar el tratamiento de fertilización in vitro”.
Y así fue, su hermana Taylor, de 24 años, se los ofreció antes de que Amber se lo pidiera para comenzar juntas un rígido tratamiento que consistía en inyecciones hormonales.
El proceso fue muy difícil y largo, ya que la joven finalmente quedó embarazada después de tres meses justo cuando las esperanzas se estaban acabando. “Estábamos tan felices, cuando Taylor vio el test ambas nos pusimos a llorar de la emoción“, agregó la joven.
Con el paso del tiempo, Amber supo que no sólo estaba esperado a un bebé, sino que dos, lo que la hizo aún más feliz.
Actualmente está disfrutando de su embarazo y compartiendo sus aventuras en Instagram.
La chica australiana quiso compartir su difícil, pero finalmente feliz historia para ayudar a otras personas que estén pasando por lo mismo o algo parecido, y hacerles saber que no pierdan la esperanza porque todo es posible.
¿Qué es un quiste ovárico?
De acuerdo a la Biblioteca de Medicina de los Estados Unidos, estos quistes se forman durante el ciclo menstrual, ya que son más comunes en la edad reproductiva (desde la pubertad hasta la menopausia).
Cabe señalar que muchas veces estos quistes aparecen cuando se toman drogas para la fecundidad.
Por último, hay que tener en cuenta que algunos quistes producen o no hormonas lo que puede alterar el ciclo menstrual, y por tanto, la fertilidad.
