Pese a que estamos en tiempos donde la discriminación es un tema que se está dejando en el pasado, algunas personas aún no entienden ese mensaje.
Lamentablemente por algo así tuvo que pasar Sherene Zarrabi, quien trabajaba en una tienda de ropa como reponedora y administrando las redes sociales.
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Según señala el sitio británico Metro, Zarrabi, quien también es estudiante de marketing de la Universidad de Oklahoma, tuvo la intención de mostrar unas prendas a través de Instagram, por lo que ella misma vistió la ropa y fue modelo por un momento.
Cuando pensó que todo estaba bien, recibió un cruel correo de la dueña de la tienda, Jessica Issler.
“Algo que quiero que te quede claro: Quiero a una chica delgada, el estereotipo de ‘modelo’ que se pruebe nuestras ropas. Por favor, usa las imágenes de nuestros modelos de Stillwater”, señaló su jefa.
También le pidió que eliminara todas las fotografías donde aparecía Sherene en Instagram, ya que no representaba la imagen de la tienda.
Pese a lo hiriente de las palabras, la joven se lo tomó con calma, publicó el mensaje en Facebook y renunció al trabajo. “Es asqueroso, desagradable. Sentí repugnancia cuando leí el correo que me envió mi jefa. Renuncié inmediatamente a mi trabajo, y sugiero que mis amigos y familiares no vuelvan a aparecer por Dainty Hooligan”, y agregó que por cosas así las mujeres tienen complicaciones por su cuerpo.
Afortunadamente logró encontrar un trabajo de inmediato, donde muchos la felicitaron por su coraje y el valioso mensaje que entregó a las chicas de su edad para que se acepten tal cual como son.