El mal olor vaginal es más común que se produzca de lo que se piensa, y no se origina sólo por un problema de higiene.
Según explicó la gineco-obstetra Angélica María Illescas, al medio mexicano Salud180, el mal olor es característico de la gardnerella vaginalis, una enfermedad que se puede contraer de dos maneras: transmisión sexual o por contacto en baños públicos o en otras zonas.
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Cuando una mujer la presenta, cuesta en poder erradicarla. La especialista hace énfasis en que “debe tratarse porque puede pasar mucho tiempo en el organismo. Al igual que la clamidia, podría generar que las trompas uterinas se obstruyan, por lo que algunas mujeres podrían tener dificultades para embarazarse.
A esto agrega que la enfermedad “da una flujo que cuando mezclamos con hidróxido de potasio tiene un olor a pescado muy mercado”.
¿Cómo se puede detectar?
Illescas explicó en conversación con Salud10, que se detecta por un flujo vaginal de color blanco o grisáceo, sumado al mal olor. Éste puede ser más notorio luego de mantener relaciones sexuales.
¿Cómo se puede eliminar?
Si notas este flujo anormal es necesario que asistas a un ginecólogo, quien probablemente te recetará medicamentos que contengan metronidazol y clindamicina. Además, es recomendable no aplicar una ducha vaginal, pues puede alterar la flora en esta zona.
Recuerda estar siempre atenta a tu salud íntima, pues detectando una anormalidad a tiempo podrías evitar graves consecuencias.