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Pamela Díaz criticó en Hay que decirlo la forma en que se abordó la polémica del "hijo oculto" de Mauricio Israel, mostrándose preocupada por la vulnerabilidad y nerviosismo de Alexander Israel durante la entrevista en Primer Plano. La Fiera cuestionó que Mauricio no interactuara con su hijo en pantalla, expresando su descontento por la exposición del joven. Además, reflexionó sobre la dificultad de equilibrar la curiosidad mediática con el respeto a la intimidad familiar, invitando a reflexionar sobre el cuidado en la televisión frente a situaciones personales delicadas.
Desarrollado por Bío Bío ComunicacionesPamela Díaz analizó en Hay que decirlo la nueva polémica que enfrenta Mauricio Israel y su "hijo oculto", como fue llamado en Primer Plano.
En ese contexto, la Fiera dio su sincera opinión, criticando la forma en cómo fue abordado el tema de Alexander Israel.
“Hoy estoy más madura y ayer vi a un joven de 25 años, yo soy mamá; un chico que expuso que no tiene ni madre ni papá presente. Reveló sus problemas que tiene de salud mental. Yo veo un chiquillo súper nervioso, que estaba muy atorado, que no podía hablar, súper vulnerable", partió señalando la animadora.
"Entonces aquí la responsabilidad en 50% es de él, porque es un adulto, y el 50% es de un canal. Es lo mismo que yo digo cuando vamos a presentar a gente en los realities, lo expongo porque he estado en los realities y he visto las cosas que pasan. Y creo que el tema de exponerse, en este caso, él quiso hacerlo, porque él quería la plata, pero llega un momento en el que casi está pidiendo atención de su papá".
Pamela continuó con su análisis, precisando que el joven quedó mal tras la tensa situación que se vio en pantalla. "¿Qué es lo que pasa? Sale Mauricio Israel y ni siquiera lo pesca, ni siquiera le habla. Entonces, al final, todo formó una situación que queda él sentado mucho más triste que antes, mucho más vulnerable que antes, mucho más expuesto".
En la misma conversación, Pamela Díaz cuestionó cómo se llevó en pantalla la situación, considerando que el joven no se veía bien.
"Es muy difícil como animador tratar de apoyarlo (al entrevistado), porque tú también quieres que cuente cosas, porque es un morbo tremendo. Por algo todos estábamos viendo la entrevista y nos gusta el tema", aseguró.
Y en esa misma línea, agregó: "Pero si yo tengo hijos, y Julio también tiene hijos, y todos hemos tenido algún tema con nuestros hijos... cuando tú estás sentado, animando, y los ves que se está atorando, es porque lo está pasando pésimo".
Finalmente, Pamela recalcó que "lo veo no solo como animadora, sino como mamá también. Yo creo que es un tema en el que deberíamos poner un poquito más de ojo, tanto los canales como nosotros quienes estamos haciendo televisión. Es un tema personal, mío, porque hoy me siento un poquito más madura".