El alcalde de la comuna de San Ramón, Gustavo Toro, participará en La divina comida, capítulo que se emitirá este sábado.

En la oportunidad, hablará de qué lo motivó a meterse en la carrera edilicia.

“Yo creo que algo que me ha marcado mucho en la vida son las desigualdades sociales. Descubrí esta vocación por servir a los demás, eso es lo que me mueve”, declaró.

Consultado sobre cómo llegó a ser alcalde, comentó que “me tocó ser concejal en un momento muy difícil en San Ramón, el exalcalde fue sindicalizado por vínculos con el narcotráfico. La mayoría de los concejales se hicieron los locos; yo empecé a denunciar”.

Por lo mismo, aseguró, “me amenazaron de muerte, dos veces me tiraron balas, hace dos años que estoy con protección personal. Es difícil, sobre todo cuando tienes familia”.

Fraude electoral y llegada al municipio

Gustavo Toro recordará en el programa que “nos dimos cuenta de que intervinieron las mesas con personas que no eran vocales de mesa con votos asistidos. Así pudieron meter votos a favor del exalcalde. Esa misma noche desafiamos a anular la elección y, en definitiva, ganamos”.

“A la semana siguiente a este exalcalde lo formalizan, yo soy el querellante en esa causa, quedando con prisión preventiva. Un concejal quedó preso”, destacó.

Cuando ocupó el puesto, recordó que el municipio estaba “destruido, tenía un basural clandestino en uno de los patios, y qué decir sobre las finanzas. Ninguna oficina apta para poder trabajar, así que fuimos a (barrio) Franklin a comprar muebles y escritorios con plata mía; con eso partimos”.

Alcalde de San Ramón Gustavo Toro
Agencia UNO

Alcalde y su familia

Toro contará en el programa que “mi señora quedó embarazada, también la apuntaban a ella con todo este tema. Con cuatro meses de embarazo, ella tuvo una pérdida”.

“Ella tuvo que pagar los platos por algo que estaba haciendo yo. Me llama mucho la atención que acá, pese a estar en una clínica, la trasladaron a una sala donde estaban madres con sus hijos”, compartió en conversación con el resto de los comensales: Paulina Nin, María José Campos y Rodrigo Soto.

El alcalde añadió que “al tiempo después quedó embarazada, nuestro último hijo Gabriel nació tres días antes de la elección. Salió de la clínica y dijo ‘pasemos al colegio que quiero votar’”.

Finalmente, Paulina Nin le preguntó cuál es su sueño lejos de la figura de alcalde y él contestó sin filtro.

“Me gustaría ver a mis hijos crecer, que no me pase nada para poder disfrutarlos. Esto de estar amenazado, lo único que me complica y me duele es que el día de mañana no esté para poder auxiliar y disfrutar a mis hijos”, cerró.