José Alfredo ’Pollo’ Fuentes participó en el más reciente capítulo de Podemos hablar, de Chilevisión, donde relató un duro periodo de su infancia: sufrió abuso sexual.
El cantante nacional relató en el llamado “punto de encuentro”, que fue víctima de un sacerdote.
“Era chiquito en el colegio… sufrí el asedio de un hermano sacerdote. Más que un asedio, fue violencia de querer besarte, apretarte, toquetearte, en fin; fue una cosa bien espantosa“, comentó en el programa.
El intérprete de Con mi bombo y mi chin chin, detalló que tenía 11 años: “Estaba con un compañero y nos llevó este cura a una sala de trabajos manuales que estaba más en el fondo del colegio y apenas entró a este lugar -yo estaba con equipo de gimnasia porque tenía una clase de educación física antes de eso- y una vez que entró al lugar se me fue encima”.
El sacerdote cerró la puerta de la sala, tras lo cual “empezó a toquetearme, besarme; recuerdo que me mordió la pera, y yo, desesperado, quería soltarme de esa cosa terrible que estaba viviendo”, detalló Pollo Fuentes.
“No la entendía tanto tampoco, era un cabro chico, te hablo de los años 50 y tantos. En esa época era más difícil entenderlo”, aseguró.
Afortunadamente, una acción de su compañero les permitió escapar: “Mi amigo era más vivaracho que yo y agarró una caja de cartón, pero grande, con unas cosas dentro y se la tiró desde arriba de la escalera y me soltó. Salí arrancando”.
“Fui corriendo hasta mi casa”
Tras sufrir este traumático episodio, José Alfredo Fuentes fue a su casa, donde le contó a su hermano lo que le había ocurrido.
“Recuerdo que fui corriendo hasta mi casa, que deben ser 20 a 25 cuadras, llorando, porque era una cosa muy fuerte, y le dije a mi hermano, 11 años mayor que yo”, recordó el cantante.
Tras escucharlo, él no se quedó de brazos cruzados y fue al colegio a buscar al agresor, “con ganas de matarlo”: “Lamentablemente, las cosas como se hacían en esos tiempos, la hicieron pasar debajo de la alfombra”.
Para cerrar su relato, el cantante recalcó que este violento hecho, “afortunadamente, no me dejó ningún trauma o secuela”.
Para revisar su testimonio, pincha aquí.
Cabe destacar que Pollo Fuentes ya había relatado este episodio antes, específicamente en De tú a tú, donde contó que su “mi hermano vino a sacarle la cresta al cura”, y que el hecho no fue condenado.