Hace seis años Raquel pudo compartir su pasión por la cocina en el programa culinario de Canal 13, donde cautivó a los jueces con su talento pese a ser no vidente.

Para cumplir con su misión, fue asistida en todo momento por su hija Deyanira, quien la guiaba en cada desafío culinario, aunque más que nada se preocupaba de calmar sus nervios dado lo intensa de la competencia.

Actualmente MasterChef Chile se retransmite por la tardes de lunes a viernes en Canal 13, y eso ha hecho que varios televidentes nuevamente sigan atentos el desarrollo del espacio y a la vida de los participantes fuera del programa.

Es por eso que en Canal 13 conversaron con Raquel para saber qué fue de su vida a más de cinco años de su debut en televisión. Lo primero es que sigue fascinada con la cocina pero en un contexto mucho más relajado.

Tras vivir varios años en Santiago y luego Parral, región del Maule, Raquel se trasladó a Chillán junto a su actual marido. “Estoy bien, me casé y estoy viviendo en Chillán, compré un terreno con mi marido camino a Portezuelo“, aseguró la exparticipante.

Afortunadamente, ha vivido una cuarentena tranquila alejada de la ciudad y disfruta del relajo que le entrega el campo. Además, sigue trabajando con pedidos de comida a domicilio.

He estado tranquila, el campo es súper rico. Cuando tengo tiempo salgo a caminar con mi marido (porque él está trabajando media jornada), también canto karaoke y me entretengo porque me relaja cantar”, expresó Raquel.

raquel de masterchef
Canal 13

Además, gracias a la repetición de esta primera temporada, Muñoz ha podido escuchar los capítulos, algo que no había podido hacer nunca. “Antes no había podido porque estábamos grabando, además en ese tiempo vivía en Santiago y no tenía mucho tiempo. Ahora todas las tardes me siento a escuchar el programa con mi esposo“, aseguró.

Y gracias a que por primera vez está escuchando el programa, se ha llevado varias sorpresas con algunos participantes cambiando incluso su percepción de ellos. “La verdad me he enterado de muchas cosas que cuando estuve grabando nunca supe. Aprendí a conocer a los participantes, de hecho me decepcioné un poquito porque había comentarios que hacían en contra de los compañeros, al parecer había mucha envidia entre ellos“, expresó.

Pese a lo anterior, tiene un buen recuerdo de su experiencia en las cocinas del reality culinario. “Fue una buena experiencia porque al participar con personas que no son ciegas me di cuenta que puedo hacer mucho, no importa que sea ciega, igual puedo participar y llegar muy lejos si me lo propongo. Fue una experiencia bonita“, aseguró.

Por último, contó que su hija, Deyanira, se convirtió en madre y vive feliz en la capital. “Está feliz, viviendo en Santiago, también se casó y tuvo un hijo”, finalizó.