Fue hace un par de días, que Kike Morandé volvió a convertirse en centro de polémica. Todo comenzó con la bullada biografía no autorizada de Cecilia Bolocco en donde se revela, entre otros detalles, el romance entre la ex Miss Universo y el animador hace 17 años.
En esa ocasión le preguntaron a la animadora del nuevo espacio Mey Santamaría, qué opinaba del asunto en cuestión, y la cubana no tuvo “pelos en la lengua” para decir que al animador le gusta alimentar rumores de conquistas.
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“Dicen que se acostaba con todas las mujeres que estaban en Morandé con Compañía y conmigo jamás sucedió (…) esas mismas declaraciones que el Kike da muchas veces, que son políticamente incorrectísimas, lo hace porque es parte del negocio”, afirmó en declaraciones recogidas por Glamorama.
Lo que la modelo no esperaba es que otro personaje de este show la mandara a vivir a Cuba por sus dichos. Se trata de Willy Sabor, quien señaló que Santamaría jamás debería volver a trabajar con Kike. Rápidamente saltó a su defensa otra ex musa de Morandé con Compañía, Claudia Schmidt.
Esta le dijo al locutor que él no era el más indicado para hablar del tema, ya que el fue uno de los primeros en dejar el programa. De hecho, la rubia panelista de SQP no tuvo pelos en la lengua para decirle “cara de raja”.
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La reacción de Willy Sabor fue esta: “Si encontrai’ que soy cara de raja, soy cara’ raja no más. Total uno ya viene de vuelta, yo estoy en Mega y tus palabra son me dan absolutamente nada. Él (Kike) me devolvió la mano volviendo al programa y yo soy agradecido de él y donde sea que esté, lo voy a defender”, fueron sus duras declaraciones en Intrusos de La Red.
“Kike es una gran persona. Fue una gran persona contigo y con mucha gente, así que deja de hablar tonteras (…) Lo que estás haciendo es un show, porque tú sabís cómo es el Kike. Lo otro que te puedo decir Claudita, es que nunca se sabe cuánto vas a durar en ese programa”, amenazó el comunicador.
Pero Schmidt no se dejó amedrentar: “encontré que Willy se fue al chancho con sus declaraciones. Creo que no corresponde, que se lo tomó muy a la personal. Siento que está reaccionando de una forma muy extraña”, detalló a Intrusos.
Luego agregó que “me queda la duda de por qué está reaccionando de esta forma, porque está atacando, está siendo completamente discriminador. A Mey Santamaría la mandó a Cuba”.
Schmidt advirtió que no necesita amenazarla con sus posibilidades de trabajo, al igual que a la cubana: “Tengo 40 años, soy rubia, pero pienso mucho más de lo que se imaginan”, remató.