Cualquier padre o madre sabe lo difícil que es mantener entretenidos a sus hijos, sobre todo en tiempos de cuarentena, teniendo que ingeniárselas el doble para conseguir el objetivo.

Sin embargo, el portero argentino Sergio Romero fue un paso más allá e instaló un verdadero parque de diversiones gigante en su propio hogar, para garantizar la diversión de sus tres hijas, aunque la historia no tuvo un final feliz: fue denunciado por sus vecinos.

La estructura que levantó Romero en el jardín de su hogar, ubicado en la localidad inglesa de Cheshire, está avaluada en 24 mil euros (más de 21 millones de pesos) y consta de un castillo de 3,6 metros de altura, resbalines de 3,2 metros y un refugio de 4,2 metros.

Todo bien hasta ahí, sobre todo para Jazmín, Chloe y Meghan, hijas del golero del Manchester United y de su esposa Eliana Guercio, quienes disfrutaban de los llamativos juegos. Eso hasta que sus propios vecinos denunciaron al futbolista, por no contar con un permiso de planificación.

“Esta enorme instalación es más propia de un parque de atracciones que de una tranquila calle residencial” y “distrae a los conductores que pasan por el lugar”, fueron parte de lo reclamos que llegaron a la autoridades, detalla el medio inglés The Sun.

De acuerdo al medio británico, ninguno de los habitantes de la zona fue consultado para montar este juego, incluso algunos de los residentes del lugar indicó que “por lo general, se espera que dicha estructura se coloque en el jardín trasero”.

Recordemos que no es la primera controversia que ‘Chiquito’ Romero protagoniza este año fuera de la cancha, ya que en enero chocó su Lamborghini Gallardo cuando se dirigía a uno de los entrenamientos de los ‘Diablos Rojos’.