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Con José Antonio Kast como Presidente electo tras la segunda vuelta presidencial, Franco Parisi destacó el fortalecimiento del voto anti comunista como factor clave en el triunfo, con Kast obteniendo el 58,17% de los votos frente a Jeannette Jara. Parisi subrayó el rechazo al comunismo como motivo de la elección, expresando preocupación por no querer un escenario similar a Venezuela. Afirmó que el resultado fue una combinación de castigo al Gobierno anterior y miedo, llamando a analizar con cautela el nuevo escenario político. En cuanto a la posición del partido PDG, indicó que actuarán como oposición constructiva, apoyando medidas que favorezcan la estabilidad económica y las libertades de los chilenos. Rechazó cualquier posibilidad de quiebre institucional y anticipó que la luna de miel de Kast será corta, instando a la humildad y a la construcción con todos los sectores.
Con José Antonio Kast ya instalado como Presidente electo tras imponerse en la segunda vuelta presidencial ante Jeannette Jara, Franco Parisi (PDG) entregó su lectura del resultado y apuntó, una vez más, al “voto” que se movió por temor al comunismo.
Según los últimos cómputos del Servel, Kast se quedó con el 58,17% de los votos, en una elección marcada por una ventaja amplia frente a Jara.
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En ese contexto, y consultado por el desempeño del voto nulo y blanco, el excandidato presidencial abordó en Meganoticias el escenario con una frase: "Quedó claro que comunacho no es". Y desde ahí lanzó su interpretación del triunfo.
Franco Parisi tras triunfo de Kast: “El voto anticomunacho fue muy fuerte”
Parisi aseguró que no esperaba una diferencia tan holgada, aunque remarcó el factor “anti” como motor de la jornada. “Yo creo que el voto anticomunacho fue muy fuerte”, afirmó.
En la misma línea, sostuvo que conversó con personas que le transmitieron una preocupación concreta: “Yo lo hablé con varias personas y era que, mira, no queremos llegar allá, no queremos llegar a cerca a Venezuela”.
Además, sumó otros elementos que, a su juicio, todavía influyen en el electorado: “Yo creo que el "chilezuela" que se creó en la segunda vuelta con Guille, yo creo que todavía está permeando y lo que está ocurriendo con toda la inmigración que llegó a Chile, creo que son los hitos que explicaron”.
Cuando le preguntaron si el resultado respondía a un voto de castigo al Gobierno o un voto de miedo, respondió sin rodeos: “Son los dos”. Luego agregó: “Lo pasamos muy mal durante la administración de Boric”.
Saludo al ganador y llamado a “analizarlo con mucho cuidado”
Parisi también dedicó palabras al Presidente electo y dijo que corresponde respetar las formas, indicando que primero hay que felicitarlo, pero esperar a que disfrute de su triunfo. "El PDG le manda un gran abrazo a través de mi persona, también le deseamos lo mejor”, señaló.
Eso sí, de inmediato pidió cautela: “Pero esto hay que analizarlo con mucho cuidado. Ganaron en todas las regiones y sabemos que las regiones se visten de distintos colores”.
Y remató con su tesis central: “…hay que considerar que aquí hay un voto, rechazo al comunismo más que un abrazo al programa”.
PDG en modo oposición, pero “constructiva”
En otro tramo, le consultaron si el PDG —con sus 14 diputados— actuará como oposición al próximo Gobierno. Parisi planteó una condición clara: “Cualquier política que sea en desmedro de la estabilidad económica de los chilenos, cualquier medida que vaya contra las libertades lógicas de los chilenos en términos de sexualidad, religiosa, etcétera y que no se apoye ni la educación pública ni la salud pública, nosotros vamos a ser opositores. Pero una oposición constructiva”.
También marcó distancia de cualquier acuerdo de coalición: “…si él nos pide ayuda, a mi persona, al presidente del partido, a nuestros diputados, vamos a estar ahí para apoyarlo, pero desde una perspectiva distante en términos de coalición”.
Finalmente, ante el debate por eventuales protestas o escenarios de desestabilización, Parisi rechazó de plano la idea de un quiebre institucional: “No, esa palabra 'Golpe de Estado´ está completamente ajeno a lo que uno pretende y nosotros vamos a ser los primeros que nos vamos a oponer a aquello”.
Y cerró con una advertencia política: “Nosotros creemos que la luna de miel del presidente Kast va a ser bastante corta”, por lo que recomendó “humildad… mesura, tranquilidad” y construir “con todo y no solamente con un sector”.
