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La Cámara de Diputadas y Diputados aprobó las modificaciones del Senado al proyecto que prohíbe el uso de celulares y dispositivos electrónicos en colegios chilenos a partir de 2026. La norma cuenta con amplio respaldo político y no tuvo votos en contra. La Superintendencia de Educación definirá la implementación de la medida, que restringirá cualquier dispositivo móvil con capacidades de comunicación, internet y contenido en línea. La prohibición aplicará durante actividades curriculares en todos los niveles de educación básica y media, con excepciones establecidas. Los colegios promoverán un uso responsable de la tecnología y deberán actualizar sus reglamentos antes del 30 de junio de 2026, con una evaluación de impacto programada para 2030.
La Cámara de Diputadas y Diputados aprobó este martes las modificaciones del Senado la ley que regula —y en la práctica prohíbe— el uso de celulares y otros dispositivos electrónicos en todos los colegios del país, dejando la iniciativa lista para su promulgación.
La discusión estaba instalada hace meses y hoy finalmente quedó zanjada, recoge BioBioChile.
Se trata de una norma con amplio respaldo político: no hubo votos en contra y el articulado se aprobó prácticamente sin polémicas. Con ello, el sistema escolar chileno se prepara para un cambio profundo a partir de 2026.
¿Qué dice la nueva ley que prohíbe el uso de celulares en colegios a partir de 2026?
En concreto, el proyecto redefine los aparatos que quedarán restringidos, reemplazando el antiguo concepto de “medios tecnológicos de telefonía móvil” por el de “dispositivos móviles electrónicos de comunicación personal”.
La Cámara detalla que en esta categoría entran todos los equipos que permiten telecomunicación, acceso a internet, interacción digital o consulta de contenidos en línea.
En simple: no solo los celulares, sino cualquier dispositivo portátil con estas capacidades.
La prohibición aplicará en todos los establecimientos que impartan educación básica y media, pero existen excepciones, como:
- Necesidades educativas especiales, cuando algún profesional acredite que el dispositivo es una herramienta de apoyo.
- Emergencias, desastres o catástrofes.
- Razones de salud, cuando exista un diagnóstico médico que exija monitoreo mediante dispositivos.
- Actividades curriculares o extracurriculares, autorizadas por la dirección del establecimiento.
- Solicitudes fundadas de padres o apoderados, en casos temporales por motivos de seguridad personal o familiar.
La Superintendencia de Educación será responsable de ordenar cómo se implementará la medida. Para eso deberá emitir instructivos que definan los mecanismos, condiciones y consecuencias en caso de incumplimiento.
Uso de celulares en el aula: así funcionará desde 2026
La nueva regla será clara: la restricción regirá durante las actividades curriculares dentro de la sala de clases y para todos los integrantes de la comunidad educativa, sin excepciones por cargo.
En educación media, eso sí, los reglamentos internos podrán fijar horarios o espacios específicos donde el uso esté permitido, considerando la autonomía progresiva de los estudiantes.
Además, los colegios deberán promover un empleo responsable de la tecnología, advertir sobre los riesgos asociados a las pantallas e incluir actividades formativas que prevengan delitos o mal uso digital.
La prohibición empezará a regir al inicio del año escolar 2026, y los establecimientos tendrán hasta el 30 de junio de ese mismo año para actualizar sus reglamentos. En 2030, el Ministerio de Educación deberá entregar una evaluación oficial del impacto de la medida.



