Por estos días se ha iniciado una campaña para disminuir la población con VIH que el último tiempo y este año, entre enero y junio, ya se han confirmado 3.849 casos en el Instituto de Salud Pública (ISP). Si la tendencia sigue, a fin de año los casos nuevos superarían los 7.000.

Pero esa no es la única preocupación ya que otra enfermedad ha aumentado el número de casos. Se trata de la gonorrea: infección de transmisión sexual causada por la bacteria Neisseria gonorrhoeae, que puede afectar genitales, el recto, cuello del útero y la garganta.

Según consignó La Tercera, así lo demostró el Boletín Trimestral de Gonorrea elaborado por el Departamento de Epidemiología del Ministerio de Salud.

Según el documento, que abarca desde el 1 de enero al 30 de junio, 1.554 nuevos casos de gonorrea han sido notificados, es decir, 8,4 por cada cien mil habitantes.

Lo llamativo es que comparado con el resultado del año pasado, los casos aumentaron en un 13% (1.369), aunque un 70% más que la mediana de casos del quinquenio 2013-2017.

Y es que por el aumento de encuentros sexuales que se generan a través de aplicaciones y el bajo uso de condón habrían influido en que la enfermedad siga en aumento.

Según los registros, en 2010 hubo 1.290 casos de gonorrea, mientras que en 2017 se registraron 2.768. Según los pronósticos, a fines de este año podrían llegar a los 3.000.

Los nuevos casos se concentran entre los 15 y los 39 años, aunque los que tienen mayores tasas de incidencia tienen entre 20 a 24 años (34,2 por cada cien mil habitantes).

Por otra parte, siguen los jóvenes que tienen entre 15 y 19 años (23 por cien mil). Luego el grupo etario de 25-29 años (22,6 por cien mil). Y del total, de la población total, los hombres son los más afectados y los resultados son claros: por cada mujer contagiada, hay seis hombres.

Por región

Tarapacá lidera con un 20,5 por cien mil; luego sigue Antofagasta con 18 por cien mil; Los Lagos (16,6 por cien mil), Aysén (11,7 por cien mil) y Arica y Parinacota (10,8 por cien mil).

Rodrigo Blamey, infectólogo de Clínica Las Condes, señaló que la gonorrea no es la única ITS que preocupa: “Tenemos una epidemia de gonorrea, de sífilis, de condiloma. El VIH también ha aumentado en todo el mundo. Esto se relaciona con el no uso de condón. Es uno de los factores. El uso de aplicaciones que facilitan los encuentros sexuales, también contribuye porque hacen que sean más fácil las relaciones sexuales, con personas que no conoces”, explicó.

Por otro lado, Mauricio Salas Sironvalle, vicepresidente de la Sociedad Chilena de Sexología, dijo que además del no uso del condón, otra cosa que incide en este aumento es la falta de educación.

Además aclaró que el contagio se produzca más entre hombres se debe a que tienen sexo con otros hombres y en su caso es más fácil de diagnosticar.

“La gonorrea es silenciosa en las mujeres. Como no da muchos síntomas externos, ya que la infección generalmente se produce a nivel de cuello uterino, hay una subnotificación. Es necesario realizar un examen tipo Papanicolau para saberlo. Puede producir inflamación en las trompas o en los ovarios. Las mujeres contagiadas, al igual que los hombres tienen riesgo de esterilidad. No es una infección inocua”, complementó Jeannette Dabanch, infectóloga y coordinadora del Comité de Enfermedades Emergentes de la Sociedad Chilena de Infectología.

Blamey añadió que “el fenómeno de las bacterias resistentes no es nuevo. En el caso de la Neisseria gonorrhoeae hace algunas décadas se podía tratar con varios antibióticos pero hoy se ha visto que se están volviendo resistentes y es necesario utilizar antibióticos de tercera generación. Pero las alternativas terapeúticas se van agotando. Es un tremendo problema a nivel hospitalario y comunitario. Tampoco es fácil de tratar, muchas veces se requiere que el fármaco sea inyectable y por vía endovenosa”.