A penas 17 años, tenía Isabel Chandía, la joven que fue encontrada descuartizada en un sitio eriazo en la comuna de La Pintana.

Según relató Carlos Collao, perito y ex PDI al matinal Bienvenidos, el primer procedimiento que se realiza en estos casos, es investigar la causa de muerte y posteriormente la identidad de la víctima.

Mientras se realizaba esa diligencia, la pareja de Chandía, acompañado de su abuela, llegaron hasta el lugar del empadronamiento para poder tener alguna información sobre el caso, considerando que la joven llevaba dos semanas desaparecida.

“Nuestros colegas de la brigada de homicidios de la Región Metropolitana, le muestran a estas personas, un tatuaje característico que tenía la joven. Ahí se produce la identificación aparente”, relató el perito, sobre el detalle que permitió reconocer a Isabel.

Posteriormente, funcionarios de la PDI concurrieron al domicilio de la pareja, donde también vivía la joven, su hermano y su cuñada. “Acceden el lugar, revisan las dependencias y establecen que el patio posterior habían movimientos de tierra, y ahí se encuentran las otras extremidades”, relató Collao.

Cabe destacar que en horas de la tarde del pasado miércoles, el hermano de la joven confesó el crimen, señalando que todo inició en una pelea, tras consumir un cóctel de drogas.