En abril del 2014, Heather McManamy fue diagnosticada de una enfermedad que año a año acaba con miles de vidas: cáncer. Y a pesar de las sesiones de quimoterapia y cirugías, su condición fue empeorando.
Es por esto que la mujer decidió programar su mensaje de despedida en su página de Facebook, que su mismo esposo terminó de publicar: “Estoy posteando esto por el bien del amor de mi vida. Estas son sus palabras. Mucho amor para todos”, explicó él.
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“Así que tengo buenas y malas noticias. Las malas son que, aparentemente, estoy muerta. Las buenas, es que si están leyendo esto, ustedes no lo están (a menos de que tengan wifi en la otra vida)”, comenzó su misiva, la cual traducimos en Página 7.

“Sí, apesta. Apesta más allá de las palabras, pero estoy tan feliz de haber disfrutado un vida tan llena de amor, alegría y grandes amigos. Soy afortunada de decir que no tengo ningún arrepentimiento y que usé cada kilo de energía viviendo al máximo”, explicó Heather.
Y “sea cual sea la religión que te entrega apoyo, estoy feliz de que la tengan. Por favor, por favor, no le digan a Brianna (su hija) que estoy en el cielo. En su mente, eso significa que decidí estar en otro lugar y abandonarla. Y la realidad es que yo haría cualquier cosa para estar con ella y Jeff”, agregó.

“Por favor, no la confundan (…) porque no estoy en el cielo, estoy aquí”, detalló. La mujer también les pidió que no se compadecieran ni apenara. “Sonrían sabiendo que la pasamos genial junto y que ese tiempo fue increíble. Odio hacer que la gente se ponga triste”, detalló.
Heather también pidió que le contaran historias sobre ella, para que su hija Brianna no la olvidara. También afirmó que ella no perdió la batalla contra el cáncer, “porque aunque el cáncer intentó quitármelo todo, jamás me quitó mi amor, mi esperanza o mi alegría”.

La mujer también agradeció haber podido pasar una década junto al amor de su vida y alma gemela, su esposo Jeff, quien nunca se mostró triste ante ella, a pesar de su enfermedad y quien la apoyó en todo momento. A sus amigos les pidió que bailaran en un bar después de su funeral y que luego celebraran por la vida en otra fiesta.
La mujer también escribió otras cartas que deberán ser entregadas a su hija cuando su primer diente se caiga, en el primer aniversario de su boda y cuando tuviese su primer hijo. La carta conmovió a miles en las redes sociales.




