Los gurús de las dietas suelen adjudicarle toda clase de problemas a esta proteína, que se encuentra presente en distintos cereales. Pero a menos que seas celíaco, no tienes por qué sacarla de tus comidas o podría acarrear pésimas consecuencias.
Se cree que la enfermedad celíaca afecta a alrededor de 7 mil 500 chilenos. Aunque la cifra no es tan alta (menos del 1% de la población), no existe cura y quienes padecen ésta deben mantener una dieta libre de gluten o sino pueden atrofiar la mucosa del intestino delgado, impidiendo la absorción de nutrientes.
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Y el gluten no sólo se encuentra presente en el pan y las masas, sino que en una montonera de productos procesados: bebidas, papas fritas de bolsa, caramelos, cecinas y salsas. Por ende, comer sano sale carísimo para un celíaco, como informa el portal de noticias mexicano Vanguardia.
Lo más extraño, es que a partir de esta complicada enfermedad autoinmune, inventaron una de las últimas dietas de moda: la gluten-free (libre de gluten). Victoria Beckham (ex Spice Girl) y la cantante Miley Cyrus son algunas de las estrellas que siguen este estilo de alimentación y lo mismo han hecho muchos ciudadanos comunes y corrientes. Pero, ¿dejar de comerlo tendrá realmente un efecto positivo en nuestro cuerpo?
¿Qué es el gluten?
Es una proteína presente en la semilla de distintos cereales. Es la misma que actúa como elemento aglutinante en la panadería y pastelería, es decir, es el “cemento” que une los diversos ingredientes y le da la consistencia elástica a las masas.
Debido a estas características, comenzó a ser incorporado a otros alimentos procesados como caramelos, embutidos y salsas, al punto que llegó a ser un elemento omnipresente en la industria alimentaria. Son pocos los cereales que no lo contienen: arroz, papas, quinoa, soya y harina de nueces pueden entrar en la dieta de un celíaco.
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A pesar de que el 7% de la población mundial tiene enfermedad celíaca, la industria gluten-free comenzó a crecer enormemente: en sólo cuatro años pasó de ganar 11.5 billones a 23 billones de dólares anuales.
El inicio del mito
Algunas personas rebajaron la ingesta de trigo y se sintieron con mejor ánimo, aunque no existen estudios científicos que demuestren que esto ocurrió por el gluten y no por otros factores. Desde entonces, esta proteína ha sido culpada por todo: desde producir síndrome del colon irritable hasta depresión y autismo.
Otra razón por la que se dio esta tendencia, es porque las personas tienden a asociarlo a los carbohidratos y creen que sin ingerirlo, rebajarán calorías; pero aunque alimentos como el pan y la harina lo contengan, no quiere decir que este elemento en particular nos haga subir de peso.
Los efectos negativos
La dieta sin gluten no tiene nada de dieta, porque los productos libres de esta proteína tienden a tener un exceso de grasas saturadas para compensar su falta. Además, obliga a prescindir de ciertos cereales y de los nutrientes que estos contienen, además que disminuye la fibra en la dieta. En resumen: si no eres un celíaco en tratamiento y controlado por un especialista, probablemente termines con kilos demás y estreñimiento.
Por lo tanto, esta dieta hollywoodense no tiene nada de light. Sólo es un atentado contra tu salud y bolsillo. El consejo es comer de todo y de manera equilibrada, vigilando el aporte de energía y de nutrientes. El gluten, a menos que seas celíaco, es algo completamente normal en tus comidas.