Tras su polémica participación en el reality Doble Tentación, Dominique Lattimore finalmente rompió el silencio sobre lo que realmente pasó entre ella y Oriana Marzoli; episodio que incluso terminó con Carabineros en el encierro.

Fue en una invitación al programa de farándula Intrusos, donde la modelo detalló cada mal rato vivido, los que fueron mucho más allá de maltrato verbal, ya que también hubo físico.

Además, puntualizó que aparte de las agresiones de la venezolana, tuvo problemas con la producción por no defenderla ante las feas situaciones que vivió.

El tema de la demanda y todo eso que hice va más allá de lo que hizo esta chica, lo hice por un tema más de impotencia, de sentirme en un lugar desprotegida y donde no se estaba juzgando y tomando en serio todo lo que se estaba haciendo. Entonces fue como un poco de mi respuesta hacia la producción y todo lo que estaba pasando allá adentro“, comenzó relatando.

“Llegó Carabineros a la casa porque los llamé y cuando los pedí, también pedí un derecho a llamar a mi representante para contarle la situación que estaba viviendo, pero me tuvieron encerrada 24 horas en un container, donde sólo pude salir a tomar aire afuera“, continuó.

La Red
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Por otro lado, la modelo aseguró que no podía llegar e irse del programa, pues había un contrato de por medio. “No podía irme, mucha gente me preguntaba por qué no renunciaba y no lo hacía porque si yo me iba tenía que pagar una multa de 35 millones y además me iba sin ni uno“, señaló.

Sin embargo, dentro de su mal rato y desesperación, Lattimore confesó que sí hubo una persona dentro del encierro que intentó ayudarla, pero la producción se lo impidió.

“Cuando la situación explotó es cuando uno de mis compañeros (Leandro) dice ‘voy a juntar a todos para que hagamos algo contra esta persona y en contra de la producción’. Lo sacaron un día en la tarde y en el cara a cara yo me doy cuenta que les taparon la boca a todos y ahí fue cuando yo me paré, me fui y llamé a Carabineros“, aclaró.

En cuanto a los constantes insultos de Marzoli, comentó que “me dijo que tenía mucho que perder por mi color de piel, que por qué estaba ahí, hablaba de la esclavitud, millones de cosas”.

“No fue tanto por la agresión verbal. Una vez también quedé sin sostén en el suelo, completamente rasguñada y todos mis compañeros vieron que quedé con los cuatro dedos marcados, y aún así nadie hizo nada… Tenía a esa niña todos los días diciéndome ‘mira, sigo en la casa’. Entonces claramente me empezó una angustia, no podía seguir trabajando, me sentía mal, tenía crisis de ansiedad en las noches, lloraba, me llevaban a dormir a los container”, finalizó.

Cabe señalar, que tras su salida del programa de telerrealidad, la chilena interpuso una demanda en contra de Marzoli, la cual sigue en proceso y debido a esto la venezolana no puede volver al país sin antes enfrentar a la justicia.