Hace rato que la crema dejó de ser una sola. En el mercado hoy existen en diversas versiones y texturas, que se diferencian de la clásica espesa e hidratante.

Por eso, no todas sirven para lo mismo. Y la cosmetóloga de la marca The Body Shop, Alejandra Abarca, explica por qué deberías saber qué textura le sirve más a tu tipo de piel. Acá, te lo explica.

Crema: la clásica y espesa contiene mayor cantidad de lípidos, por lo que es una de las favoritas para zonas como el contorno de ojos, ya que la piel de esta parte es muy fina y se reseca más que otros lugares.

Emulsión: No son pesadas ni ligeras, por lo que sirven tanto para pieles mixtas, grasas, normales y secas. Además, es una textura ideal para limpiar el rostro .

Fluido: Estos productos poseen mayor cantidad de líquido, lo que hace que sean más ligeros y perfectos para pieles normales a mixtas. Se usa mucho en hidratantes para rostro ya que así, entre el bloqueador y el maquillaje, no se sienta la tez tan sobrecargada.

Gel: Son más frescos y sin oleosidad. Son ideales para las pieles grasas y seborreicas, ya que no añaden más aceite y dejan igual de humectado.

Manteca: Es lejos la más densa y pastosa, rica en aceites nutritivos y regeneradores, por lo que es especial para pieles secas, maduras y arrugadas.