“No temas, porque yo estoy contigo. No tengas miedo (…) Te amo princesa”, escribió Nicole Pérez hace unas horas, en una de sus stories de Instagram.

La exintegrante de Mekano preocupó a sus seguidores de la mencionada red social, ya que en la imagen hacía alusión a su hija Isidora, internada en la UTI de una clínica, aunque no entregaba mayores detalles de su ingreso al centro de salud.

“A tu lado estaré y no me moveré”, agregó en otra publicación, sembrando la incógnita y encendiendo las alarmas respecto a qué tan delicado era el estado de salud de Isidora.

Nicole Pérez
Nicole Pérez | Instagram

No obstante, durante la tarde de este viernes, fue la propia adolescente quien despejó las dudas, informando que ya estaba recuperándose. “Lo que tengo es cetoacidosis diabética. Ya estoy mejor”, tranquilizó a sus seguidores.

Isidora Carvallo
Isidora Carvallo | Instagram

Esto fue confirmado por su madre, quien también escribió en redes sociales. “Mi chanchita ya está mejor de ánimo”, fue el escueto mensaje, agregando que incluso ya estaba haciendo un live con sus seguidores en Instagram.

¿Qué es la cetoacidosis diabética?

De acuerdo al sitio especializado Medline Plus, la cetoacidosis diabética, como su nombre lo indica, afecta a los diabéticos e incluso puede poner en riesgo su vida.

Esta condición se produce cuando la grasa en el cuerpo se empieza a descomponer, haciendo que el hígado convierta la grasa en un impulsor llamado cetonalo, generando que la sangre se vuelva ácida.

Respecto a los síntomas de esta condición, pueden ir de simples náuseas y vómitos hasta una disminución en el estado de la conciencia.

Alopecia

Recordemos que en enero de 2019, Nicole Pérez sorprendió al dar a conocer en redes sociales que su hija Isidora sufre de alopecia y que estuvo cerca de un año usando peluca para esconder su condición.

Fue un proceso, me costó asimilarlo. En un momento me quedaba poco pelo, y me tenía que rapar. Ahí fue ‘ya no tengo pelo’, fue lo más difícil. Me costó salir (…) No iba al colegio, hacía exámenes libres. Fue un proceso muy difícil”, explicó hace meses en Viva la Pipol.

No obstante, tras cerca de un año, la joven logró asumir su condición, por lo que decidió dejar de usar la peluca y empezar a asistir a reuniones con niñas y mujeres que vivían su misma situación.