La tarde de este miércoles, Ángeles Araya se ausentó del programa Aquí somos todos por un problema de salud, y en su reemplazo fue Francisco Saavedra quien asumió la conducción.

Para este capítulo, tuvieron como invitadas especiales a la psicóloga Alexandra Vidal y a la actriz Cristina Tocco, con quienes en un bloque del espacio comentaron el tema de las parejas que tienen mucha diferencia de edad.

La especialista reveló en esa instancia que su esposo es 17 años mayor que ella, y llevan juntos 31 años porque supieron adaptarse uno al otro y eligieron continuar pese a los prejuicios. “El amor se da. Son conexiones y no es algo planificado”, aseguró.

“Yo creo que uno de adapta cuando ama. Independiente de la edad. Lo que uno busca es la compañía”, dijo Daniel Sánchez, quien detalló que el prejuicio de las personas es un problema ajeno, y no suyo, pues de hecho, en su caso personal, se ha enamorado de mujeres mayores, pero también en su adolescencia sintió amor por otro hombre.

En esa instancia, el conductor quiso saber más detalles de cómo se dio esa atracción, pero el psicólogo le devolvió la pregunta. “Me enamoré no más. ¿Por qué tengo que racionalizar eso? A ver, cuéntame tú”, le dijo.

“Yo puedo contar cómo me enamoré de mi marido, pero…”, respondió Saavedra entrecortadamente.

“¿Te pusiste nervioso, Pancho? Cómo fue para ti, cuéntanos”, le insistió su compañero en el set.

“Para mí el amor ha sido fantástico. Encontré tranquilidad, estabilidad, risas. Yo soy mayor por 10 años”, reveló finalmente el animador de Lugares que hablan.

Aquí somos todos
Captura | Canal 13

Diversidad sin cuestionamiento

Ante las bromas que le hicieron por esta revelación de la diferencia de edad, él aclaró que no era algo que le molestara.

“Yo vi una obra de teatro que se llamaba Quien con niños se acuesta, amanece mojado, pero yo creo que nada que ver esa frase. Podrá pasar en algunas ocasiones, pero uno tiene que tomar las decisiones en la vida y atreverse a dar los pasos para ir hacia adelante”, indicó Francisco Saavedra.

“Creo que cuando uno siente el llamado del amor, el afecto y la entrega, hay que seguirlo ciegamente. No puede haber un límite de género ni nada. El único límite son los menores de edad, que hay que protegerlos, pero fuera de eso la vida sexual, el género, son cosas que quedaron en el siglo pasado. Hay que abrirnos a una sociedad diversa en la que todos cabemos, y el amor es independiente de la categoría que alguien pueda pensar“, concluyó Daniel Sánchez.