La semana pasada, la agresión de ‘Nano’ Calderón a su padre sumó otra arista luego que su polola, Rebeca Naranjo, interpusiera una querella en contra de Hernán Calderón Salinas por el delito de abuso sexual reiterado.

En el documento que tiene el carácter de reservado y al que tuvo acceso Página 7, se leen detalles de las supuestos abusos, los que coincidían en el factor ‘sorpresa’ hacia la víctima, tocando partes de su cuerpo sin su consentimiento y emitiendo comentarios fuera de lugar de corte lascivo tanto en persona como vía mensajes de texto por WhatsApp.

Mismos abusos que la joven relató este jueves en entrevista con Polo Ramírez en el matinal Bienvenidos, donde narró los hechos y, de paso, explicó por qué demoró en contarle los hechos a su pareja y por qué presentó la querella ahora.

Rebeca partió contando, tal como se indica en la querella, que se mudaron en septiembre pasado al departamento del padre de ‘Nano’, ya que tenían planificado un viaje y se les “estaba haciendo difícil económicamente pagar el departamento”.

Hasta entonces, señaló que siempre vio a su suegro como una figura de autoridad, que siempre estaba preocupado por el bienestar de ambos y que por lo mismo se sintió “acogida por él”. Además, durante meses fue poco el contacto que tenía con él ya que “se iba muy temprano a trabajar y llegaba en la noche”.

Comienzan los abusos

Naranjo señaló que fue en febrero de este año cuando la relación con Calderón Salinas cambió debido a ciertos comentarios fuera de lugar y tocaciones.

“Yo me empiezo a sentir incómoda un día que estaba en la cocina y él llega, me saluda, me pregunta cómo está todo, y me toma por detrás, me da un beso en cada mejilla y me dice que descanse. Ahí yo sentí algo como insinuación y me sentí extraña”, narró.

En ese momento le hizo el comentario a su mejor amiga, vía teléfono, detallándole el hecho y que se sentía extraña.

A Hernán (hijo) no se le comenté porque no sé, no lo podía justificar sin antes saber o tener algo que me diera la firmeza de que lo que yo estaba interpretando era cierto“, agregó.

Semanas después, el 19 de marzo, ocurrió otra situación de abuso, según Rebeca, cuando ella estaba en la pieza de invitados del departamento revisando productos de su local. “Yo estaba tomando productos, estaba agachada y siento una persona por detrás que me agarra. Yo nunca pensé que era el señor Hernán, me empiezan a tocar la piel, me dice que está rica, suavecita y ahí me doy cuenta que era él y no Nano“, expresó.

Su reacción en ese momento fue la de paralizarse, comenzó a sudar y antes de retirarse del lugar, su suegro habría vuelto a realizar un comentario fuera de lugar. “Me dice que tenía algo en el short y cuando volteo y veo que era una mancha blanca, le digo que probablemente era cloro, y ahí él se me acerca al cuello y me dice ‘cosita bien hecha tú’… me voy a la pieza y ahí me doy cuenta que lo que estaba sospechando era cierto”.

Se fue de la casa

Ese día Rebeca le inventó a Nano que su hermana tenía un problema y que debía ir a verla y quedarse a dormir allá. “Llego donde mi hermana, me desahogo con ella. El señor Hernán me llamó pero yo no le contesté, siguió llamando y mi hermana quiso contestarle pero yo no la dejé”.

Hasta ese momento tampoco quiso contarle la verdad a Nano por miedo a su reacción, pero tampoco quería volver al departamento, por lo que le propone a ‘Nano’ irse unos días a Pelarco. “Estuvimos allá como 10 días, regresamos y cuando nosotros regresamos yo sentía que se había calmado todo, porque a la semana llega al departamento la pareja del señor Hernán, por ende yo dije ‘ya pasó, hasta ahí llegó’“.

Pero no fue así, pues al poco tiempo, el día del cumpleaños de Nano, la pareja tuvo una discusión y ella se fue a dormir a la pieza de invitados, momento en que llega el padre.

“Él llega a la pieza, yo me hice la dormida pero él lo notó. Cuando me arropa se sienta al lado mío y me pregunta cómo estaban las cosas con Nano, yo le respondo cómo me sentía y ahí empieza a hacerme cariño diciéndome que me quede tranquila, que merece un hombre mejor y ahí me empieza a hacer cariño y su mano toca mi pecho”, relató.

Pese a la gravedad de los hechos, Rebeca aseguró que tenía miedo de contarlo y que no le creyeran. “Nunca le conté (a Nano) porque siempre tuve miedo, de que quizá no me fuera a creer, miedo de cómo iba a reaccionar ante esta situación“.

Polola de Nano Calderón
Captura | Canal 13

También temía al suegro y a los cercanos. “Sé que es una persona quizá poderosa y tenía miedo de que quizás me cuestionen, de que crean que es mentira, como me imagino que muchas personas lo están haciendo, pero yo creo que una mujer no podría mentir con algo de este tipo”.

Finalmente, el día que decidió irse de la casa definitivamente, recibió el último comentario de parte de Calderón Salinas, quien le habría dicho “Yo quiero que tú seas mía ¿no te atreves? Ahí yo le digo que estaba loco“.

Cuando le contó a Nano reconoció que solo le habló de los mensajes de WahtsApp, aunque él le “suplicaba” que le dijera si su padre la había tocado o no, algo que ella negó también por temor a su reacción.

El día del ataque, Rebeca recordó que estaban los dos en el departamento de Nano y él revisó su celular y vio cómo tomó fotografías. Cuando ella se dio cuenta, estaban abiertos los mensajes de WhatsApp, y Nano le dijo que iba y volvía. Desde entonces no tuvo más contacto con él, aseguró.

Respecto a por qué hizo la denuncia ahora, dijo: “Creo que se tiene que saber la verdad del porqué ‘Nano’ reaccionó de esta manera“. Asimismo, indicó que si bien no lo justifica y cree que debe tener una lección, no debería ser de esta manera.

Por último, respecto a si cree que Nano está “enfermo” como señaló Raquel Argandoña en la entrevista de este miércoles con el mmismo matinal, dijo: “Creo que es un niño que se ha criado solo y por eso creo que Nano me protege a mí de la manera que no lo hace con nadie más porque creo que conmigo se ha sentido o ha llenado el vacío que ha tenido en su infancia”.