Este viernes Contigo en La Mañana reporteó cómo se vivía la cuarentena total en providencia, siendo Juan Pablo Queraltó el encargado de entrevistar a las personas que transitaban por la comuna.

Fue en este contexto que el periodista capturó las impresiones del jefe de mantención del Parque Balmaceda, quien entregó una dura crítica respecto al rol del Gobierno y el Estado durante la emergencia sanitaria.

El hombre afirmó que estaba “arriesgando la vida” realizando su labor. Por lo mismo, le preguntaron por qué estaba trabajando, siendo que había cuarentena total y el servicio, que entrega, supuestamente, no entra en el listado de los básicos y esenciales.

Ante esto, él respondió que no ha tenido ninguna reunión con sus jefes y que junto a otros funcionarios se enteraron el jueves que su servicio es considerado “de primera necesidad, algo que yo no comparto”.

Si bien indica que tiene alcohol gel, mascarilla y que con sus colegas —quienes trabajan para la municipalidad a través de una empresa contratista— tratan de cumplir las normas de distancia, esto no sirve de mucho.

“Nosotros deberíamos estar en la casa. En este país se privilegia el capitalismo, la plata. Yo entiendo, es cierto que se producirá un tremendo problema económico en este país, pero yo privilegio la vida siempre”, afirmó.

El hombre, quien durante el estallido social ya había aparecido en el matinal y se había vuelto viral por su deslenguada opinión contra el Gobieno, relató que lleva 18 años trabajando en el parque y sabe que la mantención de este es compleja.

“Me ha costado un montón, siempre. Pero yo sé que si esto se secara lo podemos levantar, lo que no voy a poder levantar son los viejos que se van a morir”, añadió.

Tras esto, el trabajador lanzó una dura crítica al Estado. “Todos hacemos lo posible por salir (adelante), pero yo creo —y lo voy a decir sin más— nosotros, los chilenos, no estamos siendo protegidos por el Estado…”, alcanzó a decir, antes que fuese interrumpido por una acotación de Qurealtó.

Finalmente, el hombre le pidió al periodista que lo dejara terminar, y lo hizo. “El Estado chileno no protege a sus ciudadanos, este Estado está preocupado de proteger su bolsillo”, concluyó el trabajador, para luego despedirse.