Este jueves Yann Yvin visitó Concepción en el marco del programa Saborea 2019 que lleva adelante Sernatur y Sercotec, el que busca incentivar a los chilenos a preferir los productos y destinos nacionales como forma de contribuir a reactivar el turismo local.

Es en este contexto que Página 7 conversó con el francés sobre su participación en El Discípulo del Chef y lo que se viene en el programa, el que ya está en su recta final.

Yvin destacó que una de las características más interesantes del espacio de Chilevisión es que por primera vez los chefs cocinaban con los concursantes, lo que provocó que se creara “una conexión muy especial” entre ellos.

“Compartimos lágrimas, risa y sudor. La complicidad está presente en cada plato y, como siempre digo, la manera en que los cocineros decimos ‘te amo’ es través nuestros platos. Eso es lo más importante y es lo que tratamos de transmitirle a los discípulos”, comentó.

En este sentido, Yann indicó que este era una de las diferencias que tiene el programa con MasterChef Chile, en el que solo era juez y calificaba las preparaciones. Además, también señaló que la exigencia era mucho más alta en el espacio de CHV.

“El nivel de los discípulos es mucho más alto, porque trabajan con nosotros codo a codo. Nosotros (Ennio Carota y Sergi Arola) dedicamos nuestro tiempo en enseñar, minuto a minuto, mientras que en MasterChef estaban solos, esa es la diferencia”, afirmó.

El francés agregó que para El Discípulo del Chef descubrió “un camino que no conocía”, que era la enseñanza. “Los chefs no somos profes, entonces ahí tuve que bajar las revoluciones. Es difícil cuando no sabe enseñar”, contó.

Sobre la recta final del espacio, Yvin no entregó el nombre de su favorito, pero aseguró que en los tres equipos hay personas que sobresalen del resto y que son candidatos para llevarse el gran medio.

Finalmente, el chef reveló que la gran final aún no se graba porque se tomaron un “descanso”, pero que los trabajos se retomarán “muy pronto”.