La mañana de este lunes, en el matinal Bienvenidos abordaron diversas aristas del caso de Catalina y Rubén, los hermanos de 14 y 18 años respectivamente, quienes fueron hallados sin vida al interior de su casa en la comuna de El Bosque el pasado 17 de mayo.
En ese contexto, el único sospechoso del crimen fue detenido la noche del viernes, cuando pernoctaba en una choza improvisada en el cerro La Pincoya, Huechuraba.
Por lo mismo, los animadores del programa conversaron con Alejandra del Campo, la madre del hombre de 29 años que será formalizado el martes. La mujer reveló algunos detalles de la cruda infancia de su hijo, además de los diagnósticos que le dieron tanto en su paso por el Sename como en los colegios especiales por los que pasó.
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Sin embargo, una de las partes que más llamó la atención de su relato fue cuando reveló que él la visitó en su casa el mismo día en que ocurrió el doble homicidio.
“La última vez que vi a mi hijo fue el día en que se cometieron los hechos. En la tarde fue a dejar a la casa un juego de play station. Lo vi, pero no me dio la cara en ningún momento. Siempre miró para otro lado. Estaba sudado, caminaba de un lado para otro sin control, no sabía qué decir”, reconoció la entrevistada.
No hubo más contacto
“Le dije que se quedara para tomar una taza de té. Dijo que se tenía que ir porque se le iba a pasar la micro y era tarde… Él estaba mal. Quise retenerlo, pero sin saber lo que estaba pasando. No pensé nunca que había hecho eso. Me enteré al otro día, como ustedes (por la prensa)”, añadió después.
En ese punto, Amaro Gómez-Pablos le preguntó si hubo algún intercambio telefónico posterior entre ella y su hijo, considerando que él tenía en su poder distintas tarjetas de teléfonos celulares de prepago, lo que le permitió enviar los audios de los que se habló también en la prensa.
Sin embargo, ella descartó haberse comunicado con él, y señaló creer que los chips de celular eran para ver las noticias y enterarse de lo que estaba ocurriendo. “No se comunicó conmigo ni con nadie de la familia, ni siquiera con su hermano”, reconoció Alejandra del Campo.
Completo silencio
En otro punto de la entrevista, los animadores de Bienvenidos repararon en el hecho de que, pese a que han pasado tres días desde la detención, y solo quedan horas para que sea formalizado, el sospechoso del doble homicidio no ha dado ningún tipo de declaración.
“No va a hablar con nadie. Solo va a hablar con alguien con quien tenga confianza. Y más que seguro, si llega a hablar, solo va a decir fantasías e incoherencias”, advirtió la madre.
“¿A usted le contaría la verdad?”, quiso saber Tonka Tomicic.
“Yo pienso que si nos dejan a solas, sí, pero si él ve que hay otra persona al lado, no va a decir nada”, respondió Alejandra, añadiendo que ella le ofreció a la PDI hablar con él en una habitación para que pueda contarle la verdad de lo que pasó, y tal vez grabar esa conversación.
Carlos Collao, comisario en retiro de la PDI, explicó en el set del programa que eso se puede usar como una herramienta de parte de la fiscalía, pero depende del fiscal. “Tenerlos solos en una habitación cerrada podría darse para que se entregue una información relevante o se pongan de acuerdo en algo. Una información externa que el detenido no maneje, podría ser entregada por la madre. Uno no tiene esas garantías. Por eso veo muy difícil que eso se dé”, advirtió.
