Tras indagar las causas de la caída del adolescente de 16 años desde el Puente Pío Nono la pasada tarde del 2 de octubre, el Ministerio de Público identificó y formalizó a un carabinero responsable del hecho que causó fracturas y contusiones en el menor de edad y, además, se abrió una nueva arista en la investigación: un eventual intento de otros funcionarios por encubrir el hecho.

Recordemos que este domingo el carabinero Sebastián Zamora Soto, de 22 años, fue imputado por el delito de homicidio frustrado por haberse “abalanzado” contra el estudiante. En la audiencia la fiscal de Alta Complejidad Centro Norte, Ximena Chong, exhibió cuatro videos, fotografías y declaraciones donde se sustentó su imputación.

“Se abalanza en diagonal contra el adolescente, tomándolo con sus brazos e impulsando de tal forma que lo eleva sobre la baranda en cuestión y lo hace caer de cabeza hacía el río Mapocho”, detalló Chong en la oportunidad y agregó, “el funcionario de Carabineros no realiza ninguna acción orientada a evitar la caída (…) y junto con el resto de los funcionarios se retira del lugar“.

Fue aquí cuando el Ministerio Público reveló un antecedente desconocido hasta este domingo: el “encubrimiento” por parte de algunos uniformados.

Según precisó la fiscal Chong, minutos después de que el menor sufriera graves lesiones, Carabineros le envió a PDI una “minuta de entrega de detenido, un acta de información de los derechos del detenido” y tres declaraciones de funcionarios. Esta información, según la persecutora, “no cuadra” con lo ocurrido este viernes.

Es que, según los dichos de los funcionarios de 1ª y de la 40º Comisaría de Santiago, quienes realizaron cuatro llamadas telefónicas a los fiscales Centro Norte de turno, el adolescente, que tras la caída fue internado en la Clínica Santa María, fue “entregado” en dependencias de la 1ª Comisaría y detenido a las 20.40 en el recinto médico.

Sin embargo, la fiscal Chong aseguró que esta información es falsa, pues los médicos y enfermeras que recibieron al menor declararon que el paciente no llegó custodiado por Carabineros, incluso ningún funcionario ingresó a la clínica para realizar un procedimiento.

La conducta posterior del imputado tiende a mediatizar y, derechamente, a procurar encubrir como supuesta detención las circunstancias que rodean al acto homicida“, indicó Chong.

Por esta razón, el tribunal decretó prisión preventiva para Zamora Soto y, por su parte, la Fiscalía Centro Norte decidió ampliar la investigación a más carabineros, incluidos otros de mayor rango que el imputado, por los delitos de obstrucción, falsificación de documento público y encubrimiento.