Esta jornada se dieron a conocer dos informes de la Policía de Investigaciones (PDI) -uno de ellos fechado en abril de 2018 y el otro en febrero de 2019- sobre las indagatorias que estaba llevando adelante la institución por el caso de Fernanda Maciel.
La joven desapareció el 10 de febrero de 2018, cuando tenía siete meses de embarazo y salió de su casa ubicada en Conchalí. Tras más de un año y cuatro meses de búsqueda, el cuerpo de la joven fue encontrado en una bodega cerca a su vivienda, lugar que su familia siempre indicó como lugar clave.
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Por el caso, y como presunto autor, fue detenido Felipe Rojas, vecino de Fernanda Maciel que será formalizado el jueves por los delitos de homicidio e inhumación ilegal, a la espera de ver la posibilidad de sumar cargos por aborto.
El primer informe -abril de 2018- indica que “a juicio de los oficiales investigadores, Felipe, pudiera estar involucrado directa o indirectamente en la desaparición de Fernanda Maciel, pues habría sido él, en este contexto de consumir droga, quien fue la última persona que compartió con ella en dependencias de la bodega”. En tanto, el segundo -febrero 2019- asegura que, si bien en la bodega no se encontraron rastros de sangre, Rojas tiene relación directa con la desaparición.
Sin embargo, Radio Bío Bío tuvo acceso a un tercer informe elaborado por la Policía de Investigaciones que data del 24 de octubre del 2018.
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Este documento fue enviado al Ministerio Público e indica que se trabajaron ocho hipótesis en torno a la desaparición de la víctima.
Dentro de ellas se encuentra, por ejemplo, la muerte natural, abandono voluntario, secuestro, muerte accidental, participación de terceros y conducta autodestructiva, entendiéndose esto último como suicido.
¿Qué indica el informe?
De acuerdo al informe que concluyó en octubre de 2018 por parte de la Policía de Investigaciones, la hipótesis que tomó mayor fuerza es aquella “relacionada a un desenlace de tipo autolítico, aquello establecido desde la perspectiva criminológica, fundamentando a través de lo desarrollado en el cuerpo del presente informe”.
A esto se añade que “sumado a los escasos antecedentes desde la perspectiva criminalística que permitieran restarle valor y sustento a dicha forma de desenlace, no hallándose de esta forma evidencias empíricas concretas que por su valor propio permitieran desestimar aquella ligada a un fin autodestructivo”.
De esta manera, la principal hipótesis que mantenía la PDI, hasta ese momento, es que no había participación de terceros en la desaparición de Fernanda Maciel, por lo que habría sido un suicidio.
Escuchas telefónicas desde marzo de 2018
Además, según fuentes de La Radio, la Policía de Investigacionessiempre tuvo las intervenciones telefónicas del celular de Felipe Rojas.
Sobre este tema, las primeras escuchas las tuvieron de marzo a junio de 2018, es decir, a un mes de la desaparición de Fernanda Maciel.
Luego retomaron estas intervenciones telefónicas en el periodo que va entre septiembre de 2018 a marzo de 2019.
