Mujer amarró a su marido con una cuerda y lo llevó a vacunarse contra el COVID-19: video es viral
Una mujer de Río Largo, en el estado de Alagoas, en el noreste de Brasil, ató a su marido con una cuerda y lo llevó hasta un centro de vacunación contra el COVID-19. El motivo: el hombre no tenía intenciones de inocularse.
La escena fue captada por otra mujer que se encontraba en el lugar. “Un hombre amarrado para recibir la vacuna”, escribió sorprendida luego de compartir el clip que se viralizó rápidamente en redes sociales, principalmente en Twitter.
[lee-tambien]https://www.pagina7.cl/notas/virales/2022/01/25/joven-estadounidense-dona-rinon-pareja-infidelidad.shtml[/lee-tambien]
A lo largo de los 17 segundos de video, se puede ver al marido de la mujer con la mascarilla puesta, y amarrado con una cuerda que rodea sus brazos y le impide escaparse. Mientras tanto, su esposa está de pie y sujeta la soga entre sus manos.
En los últimos instantes de la escena, ambos miran a un punto que la cámara del celular no es capaz de mostrar. Probablemente, estaban esperando a que el sujeto recibiera el turno correspondiente para inocularse.
La reacción en redes sociales al video viral del esposo atado
A través de internet, el debate estuvo ciertamente dividido entre quienes apoyaban a la mujer y quienes no. “Me parece absolutamente correcto. No viviría bajo el mismo techo con alguien a quien no le importa la vida“, señaló una internauta.
“Él: ‘No voy a ponerme la vacuna’. Ella: ‘¿Qué dices? Ya lo verás'”, la acompañó otra quien, luego, añadió: “Debería ser tendencia”. Mientras tanto, desde el otro lado de la vereda, se preguntan qué ocurriría si los roles de la situación estuvieran invertidos.
“Me gustaría ver vuestros comentarios si fuese al contrario”, acusó un usuario de la red social Twitter, a la vez que otro procedió a acotar: “Si fuese a la inversa, seguro que nadie se estaría riendo”. Finalmente, hubo quienes defendieron la libertad de decidir.
“No le encuentro la gracia a que unas personas obliguen a otras (a vacunarse)”, subrayó un individuo. “Nunca haría eso. Cada uno tiene el derecho de hacer lo que quiera. Estoy a favor de la vacuna, pero no obligo a nadie (a ponérsela)”, reclamó otro.