Una serie de beneficios para el organismo es lo que conlleva la ingesta de agua, la cual se recomienda por expertos sea de dos litros al día.

Este elemento que es vital para la vida humana, también es clave para aquellas personas que quieren dejar las bebidas gaseosas o con colorantes y altas en azúcar, lo que aumenta la saciedad en aquellas dietas.

Sin embargo, algunos especialistas en alimentación sugieren que el consumo de agua durante las comidas impide la pérdida de peso, situación que se presenta más en los regímenes alimentarios donde hay que dividir los alimentos en proteínas o carbohidratos.

Esto, ya que aseguran que cuando ingerimos hidratos de carbono dificulta la digestión y hace que estos alimentos engorden más, lo que conllevaría a la dilución de los ácidos del estómago, teoría que fue derrocada por los expertos, según señaló Vanitatis.

¿Retención de líquidos?

Otra de las teorías en torno a la ingesta de agua durante las comida era que provocaba retención de líquidos, una hipótesis que también fue desechada luego que salieran estudios que sostienen que el agua es un diurético que mejora la función renal al disminuir la concentración de toxinas y que ayuda a eliminarlas a través de la orina.

Es por eso que se debe hacer énfasis en que el agua no nos ayudará ni aumentar, ni a ganar peso, pero sí con ella podemos engañar al estómago.

Lo anterior, ya que consumir este elemento previo a una comida, esto hará sentir a la persona una mayor saciedad y por ende un menor apetito, lo que disminuirá el consumo de alimentos.