Estados Unidos es un país que destaca arquitectónicamente por hacer todo a lo grande. Inmensos rascacielos, amplias carreteras de cuatro o cinco pistas, gigantescos centros comerciales e imponentes edificaciones.

Sin embargo, el paradigma pareciera estar dando un giro. Según información entregada por la agencia de noticias AFP -citado por el medio BioBioChile-, cada vez son más los estadounidenses que están optando por las llamadas “Tiny houses”.

¿El minimalismo gana terreno? Se trata de casas de menos de 40 metros cuadrados, con todo lo necesario en su interior, pero que resultan ser mucho más baratas que una vivienda tradicional y además, tienen un menor impacto medioambiental.

El precio por una casa nueva de un poco menos de 20 m2 con un interior personalizado, sería de unos 50.000 dólares (34 millones de pesos), mientras que para una casa ‘normal’ hay que contar con al menos 300 mil dólares (208 millones de pesos).

Estos últimos 40 años, “la sociedad estadounidense siguió la moda del gigantismo, de construir casas enormes, pero hoy, en algunos lugares, la gente toma conciencia de que vivir con menos es muy ventajoso para su estilo de vida”, analizó Marcus Stoltzfus, director comercial de Liberation Tiny Homes.

A pesar de las ventajas que presenta el vivir en una de estas casitas, el fenómeno aún no se ha masificado. En Estados Unidos, existen sólo 10.000 mini casas. Los estados que han tomado la delantera en este vanguardista tema han sido Colorado, Nevada y Carolina del Norte. De momento, las regiones más pobladas, no han prestado atención a la idea.

Uno de los grandes obstáculos de este tipo de hogares es la legislación. En general, se suele fijar una superficie mínima para una casa, que casi nunca baja de los 80 m2. Además, históricamente, las casas rodantes se han ganado una mala reputación, asociándose a viviendas de mala calidad y utilizada por gente pobre. Estas casas tienden a percibir un prejuicio similar.

Y tú, ¿vivirías en una ‘Tiny House’?

Tiny Houses toman fuerza en Estados Unidos
Don Emmert | AFP