Leonie Fitzgerald, de 44 años y su esposo Peter, de 51, dieron una última oportunidad a los tratamientos de fertilidad, dando como resultado la espera de sus tres hijas. Tras sufrir cuatro abortos causados por niveles bajos de progesterona, hoy están agradecidos de tener a las niñas en casa.
El 23 de agosto de 2020, en plena pandemia, la pareja se convirtió en padres de Liliana, Isabella y Charlotte.
Al tratarse de embarazo complicado, sumado al coronavirus, Leoni pasó la mayoría de este tiempo en cama debido a las náuseas matutinas graves que sintió antes de dar a luz a las 32 semanas y seis días. El trabajo de parto fue sumamente complicado. Entró en coma inducido durante 16 horas después de una convulsión y un aumento de la frecuencia cardíaca.
Tras nacer, las trillizas pasaron 34 días en la UCI antes de regresar a casa. En una entrevista a Daily Mail, Leoni contó que “me sentí bastante desconectada de ellos porque no recibí el primer abrazo. Pero nos unimos cuando me senté a su lado mientras estaban en recuperación”.
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La pareja contó que les pareció surrealista llevarlos a casa, ya que no sabían por dónde empezar la crianza. “Al principio pasamos por 10 pañales y 24 biberones por día. A veces debemos tener mil pañales a la vez en casa”, afirma Peter.
A pesar de todo el trabajo, el feliz padre comenta que “no cambiaría nuestras ocupadas vidas por nada del mundo”.
Por su parte, Leoni se sincera y afirma que “ser una madre mayor definitivamente tiene sus ventajas, ya que tenemos un enfoque más positivo de la vida en estos días y seguimos nuestra intuición. La sabiduría está de nuestro”.
La feliz familia relata sus aventuras a través de su Instagram, donde comparten tiernas postales de las niñas.
Seis años de espera
Leonie comentó al medio británico que trató de quedar embarazada durante seis años. Los primeros cuatro fue de manera natural, mientras que los últimos dos fue a través de tratamientos de fertilización.
Estuvo embarazada cuatro veces a lo largo de estos años, gestaciones que terminaron en aborto por los bajos niveles de progesterona de su cuerpo.
Tras gastar cerca de 100 mil dólares (71 millones de pesos) en doctores, y usar medicamentos alternativos como hierbas, Leonie quedó muy sorprendida cuando un ultrasonido reveló que tres corazones latían en su vientre. “Fue en nuestro tercer intento cuando quedé embarazada. ¡No podía creerlo!”, reveló.
La australiana describe la maternidad como una “experiencia solitaria” por los cuatro abortos que sufrió, tema que considera que es un tabú en la sociedad.
Tampoco sentían que la adopción fuese una alternativa para agrandar su familia, ya que se creían un poco mayores para hacerlo.
Tras toda esta experiencia, Leonie y Peter consideran a sus hijas como un milagro.
