Jihad Al-Suwaiti es un joven palestino protagonista de una emotiva historia que ha conmovido en las redes sociales, debido a la triste muerte de su madre por coronavirus.

La mujer era Rasmi Suwaiti, de 73 años, enferma de leucemia y que lamentablemente contrajo el COVID-19, siendo internada en el hospital estatal de Hebrón, en la localidad cisjordana de Beit Awa, donde comenzó un tratamiento que resultaría infructuoso.

Durante su llegada al centro asistencial, Rasmi quedó aislada en la Unidad de Cuidados Intensivos, por lo que la única forma que encontró su hijo para poder verla, era escalar diariamente a la ventana de la UCI.

Y fue sólo de esta misma manera en que el joven pudo despedirse de su progenitora. “Me senté impotente detrás de la ventana exterior de la sala de cuidados intensivos, observando sus últimos momentos. Estaba desesperanzado””, dijo Jihad al medio Arabic Post y que recoge el sitio NDTV.

Además agregó que quiso ingresar a su habitación para despedirse una vez que supo de su empeoramiento de salud, pero no se le permitió el ingreso.

Historia llegó a la ONU

La historia ha conmovido a miles de usuarios en la web e incluso uno de ellos fue el diplomático Mohamad Safa, miembro de la ONU.

“El hijo de una mujer palestina infectada con COVID-19 subió a su habitación del hospital para sentarse y ver a su madre todas las noches hasta que falleció“, escribió Safa mientras compartía la foto que ha dado la vuelta al mundo.