El inicio de la vida sexual está ligado indiscutiblemente a los métodos antionceptivos para evitar embarazos no deseados en las mujeres o evitar enfermedades.
Si bien, el Ministerio de Salud enumera 19 de ellos, cinco son los más utilizados: la píldora, dispositivo intrauterino, condón, la inyección y coito interrumpido.
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La píldora
Según Ramiro Molina, médico gineco-obstetra, especialista en ginecología infanto juvenil, de la Universidad de Chile, señaló a T13, que este método es el más popular, ya que es utilizado por un 17% de la población.
El porcentaje de falla varía entre un 6 y 8 por ciento, cuando se usan de manera incorrecta y de un 0,2% si se utilizan bien.
“El anticonceptivo oral tomado correctamente no tiene fracaso “y las fallas ocurren cuando se toman mal por errores humanos o cuando interactúan con otros fármacos, como por ejemplo los antibióticos. Estos afectan la flora intestinal y por lo tanto la absorción de las hormonas de la píldora. La mujer también puede quedar embarazada si tuvo una gastroenteritis que le generó diarrea o vómitos. Entonces ahí quedan dos alternativas o suspenden las relaciones sexuales o usan condón”, indicó Molina.
¿Y los efectos secundarios?, el especialista aclaró que la aparición de acné o subir de peso son mitos que quedaron de las pastillas antiguas ya que las de ahora no generan esos problemas.
Aquellas mujeres que han sufrido tromboembolismo o tienen antecedentes familiares de esto deben consultar con un especialista.
Dispositivo intrauterino
Este sistema es usado por un 13,6% de las mujeres y Molina aclaró que es seguro, ya sea que se utilice la ‘T’ de cobre o la ‘T’ de levonorgestrel. Sin embargo, hay que aclarar que tiene un 7% de fracaso.
“En el caso de la T de levonorgestrel, la hormona se junta con el polímero, y forman una sola masa, que es el dispositivo. Este se va degradando y así va liberando las hormonas. El caso de la T de cobre es distinto, porque esta impide el metabolismo del espermatozoide, impide que fecunde al óvulo”, dijo Molina.
Eso sí, advirtió que “si una persona tiene una enfermedad de transmisión sexual no debe usar el dispositivo hasta que esté sana. Si ya tiene el dispositivo debe tratarse la infección, porque se puede complicar hasta que se produzca una endometritis o una infección en las trompas de Falopio”.
El condón
“Actualmente es muy alto el uso del condón, yo calculo que cerca de un 10% de las personas lo utilizan. Su funcionamiento es conocido: el condón cubre el pene, que al penetrar entra protegido por el capuchón, por lo tanto los espermatozoides no toman contacto con la vagina y quedan alojados en el condón tras la eyaculación”, aclaró el médico.
Pero no es infalible y el porcentaje de falla es del 15%, pero si se usa de manera correcta, disminuye a un 2%. Además manifestó que hay que preocuparse de usar el condón del tamaño correcto para evitar que se rompa. Otro punto importante es que debe ponerse y sacarlo cuando el pene está completamente erecto.
La inyección
Dura un mes y evita que la mujer ovule. Su porcentaje de falla es del 3% si no se pone en el momento adecuado, pero si se usa de manera correcta baja a 0,1%.
Coito interrumpido
Este método es el más popular entre los adolescentes y personas con poca experiencia sexual. Solo es usado por un 0,4% de la población y consiste en sacar el pene de la vagina antes de la eyaculación para que el semen caiga afuera.
Este método es el de más alto riesgo y tiene un 19% de probabilidades de fracasar, ya que muchas veces el hombre no alcanza a sacar el pene de la vagina y eyacula en la entrada o cerca de los genitales.