Encerrada, temerosa y con claras secuelas producto del abandono. Graycie miraba entre los barrotes de su jaula con un claro dejo de tristeza y soledad en sus ojos.

La encontraron perdida, a kilómetros de su casa y la trasladaron hasta el centro de cuidados animales Granite Hills, en Georgia, Estados Unidos, pero no reaccionaba a las atenciones. Simplemente se escondía, escapaba, rehuía.

Evidentemente se encontraba estresada, confundida, por lo que la rodeaba y extrañando lo conocido, las caricias de una familia que alguna vez tuvo, pero un simple gesto de amistad y preocupación cambió la historia.

Lee también: Maverick: El increíble perro abuelo que logró sobrevivir 3 días bajo tierra

El doctor veterinario Andy Mathis logró calmarla y ‘aguacharla’ cuando no encontró una mejor manera de acercarse, que al momento de darle comida, entrar y sentarse junto a la perrita para tomar su propio desayuno. Cuando le pone el bowl con comida un poco más cerca comienza a ocurrir el milagro.

“La dejaron en el medio de la nada, tenía un collar, así que le perteneció a alguien en algún momento. Aunque estaba alimentada, no era lo suficiente. Pesaba alrededor de 9 kilos cuando la encontramos, cuando debió pesar por lo menos 15”, comentó el doctor Mathis en ABC News.

En el video se puede ver cómo lentamente se entrega hasta ceder completamente al cariño del veterinario que a pesar de todo y de los graves daños emocionales de Graycie, se siente motivado.

Hemos tenido en el pasado perros que tardaron hasta 6 semanas en sentirse cómodos, en salir, pero luego aman jugar, les encanta estar con otros perros y también conmigo. No me hace tan triste ver a los perritos emocionalmente quebrados o alejados, porque, con el tiempo, sé lo que es posible”, dijo el doctor, dejando entrever que es mejor que estén ahí, con alguien que se preocupa y les dará las atenciones necesarias, antes que con personas que los dejaron a su suerte e incluso los maltrataron.

Un caso que hace recordar al cachorro maltratado que reaccionaba con pánico frente a los humanos que finalmente lograba entregarse al cariño y después fue adoptado y tiene una feliz y hermosa vida.

Hermoso gesto de este veterinario que muestra como una simple acción puede cambiar la vida de un animalito, y por qué no del propio hombre, para siempre