Muchas parejas evitan el uso del condón por una infinidad de razones. Comodidad, sensibilidad, tiempo perdido, no importa cual sea la excusa, lo cierto es que a pesar de su bajo costo y sus accesibilidad, existen una serie de mitos entorno a estos anticonceptivos.
Un artículo del medio El Comercio desmitificó algunos de los mitos que deberías saber para llevar una sexualidad plena y protegida.
Lo primero que debemos saber de los condones es que son el único método anticonceptivo que puede prevenir las enfermedades de transmisión sexual, el VIH, además de los embarazos no deseados.
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Algunas parejas prefieres no usarlos porque el hombre pierde la sensibilidad lo que puede llevar a perder la erección. Así lo señala la psicóloga Carolina Olazábal del Instituto Guestalt, quien asegura que la solución es integrar al condón como parte del juego sexual.
Para cuidar los profilácticos es necesario guardarlos a en lugares secos, con poca luz y a temperatura ambiente. Asímismo la doctora Maribel Dextre de la Clínica Javier Prado recomienda evitar el uso de lubricantes con aceites. En su lugar los de base acuosa ayudan a no dañar el látex.
Los errores más frecuentes que se cometen entorno al uso de condón son:
Dos son mejor que uno: El uso de dos profilácticos puede provocar roturas del látex.
Sólo para sexo casual: Si tienes pareja estable y no quieres tener un bebé, úsalo.
Inflarlo para ver si está dañado: Los condones son testeados varias veces antes de ser envasados y enviados a las distribuidoras. Manipularlos sólo empeorará las cosas.
Se rompe con facilidad: Los preservativos se rompen cuando no son utilizados de forma correcta o no han sido mantenidos en condiciones óptimas.