Por insólito que suene, la inglesa Caitlin Finley ha convertido su obesidad en su fuente de trabajo y estilo de vida. Esta joven de 22 años gana alrededor de 120 mil pesos a la semana comiendo ante una webcam y revelando sus curvas, y dice estar feliz con esto.
A pesar de lo peligroso que es que Caitlin consuma más de 10 mil calorías al día, su madre, Dorothy (50), le ha dado su completo apoyo y hasta la ayuda con las fotografías: “Mi madre es un gran apoyo y está orgullosa de mi carrera. Ella es mi mayor animadora”, declaró al medio británico Mirror.
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Caitlin, quien posa y se presenta en Internet bajo el nombre de Calico Bombshell, no siempre tuvo esa autoestima y confianza. Desde niña era fanática de la comida grasosas, tenía problemas con su peso y los otros chicos en la escuela la molestaba.

“La niñez fue difícil para mí. Me molestaban los otros niños y llegaba a casa inundada en lágrimas”, declaró. En algún momento, se puso a hacer dieta para dejar de ser blanco de burlas, pero bajar de peso no la hizo sentir mejor: “Sentía que era naturalmente una persona grande y que me estaba traicionando a mí misma”, agregó.
Hasta que llegó a la adolescencia y descubrió que existían mujeres que se dedicaban a comer y modelar sus enormes cuerpos ante la cámara… y que habían hombres que las idolatraban. Es por esto que cuando cumplió 18 años, decidió dejar la escuela y convertirse en una “bella mujer de super talla”.
Hoy, Calico afirma que “amo la manera en que me veo desde que me puse a ganar peso activamente, me hace sentir sexy. Mi especialidad es frotar y sacudir mi vientre frente a la cámara”, sentencia la mujer de 190 kilos.
A pesar de su enorme talla, ella explica que su presión sanguínea está perfecta, “pero me quedo sin aliento cuando subo las escaleras o cuando camino distancias cortas. Si mi salud se viera demasiado afectada, consideraría calmarme”.

Su madre siente que ella luce hermosa en las fotos y que no se preocupa de su peso, porque se chequea constantemente. “No hay nada malo en lo que hace. No está mostrando sus senos ni sus partes íntimas, sólo sus curvas”, declaró Dorothy.
Su carrera la ha llevado a ganar alrededor de 5 millones al mes, además de tener cientos de fans: “La primera vez que actué frente a la cámara estaba muy nerviosa. Pero una vez que empecé, fue divertido. Usé algo de ropa interior y expuse mi vientre”, relató la joven que devora pizzas y hamburguesas dobles frente a los internautas.
“Los hombres aman verme sacudir mi vientre y no se aburren de mi celulitis. Otros hombres sólo les gusta verme comer y llenarme”, detalla la bomba sexy de las tallas grandes. ¿Peligroso o no? El tiempo y su salud lo dirán.