Antes de Año Nuevo, Gissella Gallardo generó preocupación tras subir una imagen a su cuenta de Instagram, desde la clínica.

La periodista llegó hasta el recinto por un fuerte dolor en la espalda baja y fiebre.

“Al llegar, el doctor de urgencias solo me administró paracetamol, suero e ibuprofeno para bajar el dolor y la fiebre”, relató en su red social.

“Como saben, tengo a mi padre grave y yo le pedí que me hiciera los exámenes virales para descartar cualquier enfermedad que pudiese contagiarlo. Al disminuir el dolor, me mandaron para la casa, siempre diciéndole al doctor que me dolía mucho el lado derecho, pero me dijo que era un resfrío fuerte o algo así“, añadió.

Gallardo contó que el pasado viernes, durante la madrugada, su fiebre llegó a casi 40 y su malestar aumentó, por lo que tuvo que volver a la clínica.

“Ahora sí me tocó una excelente doctora y me hizo todos los exámenes para descartar apendicitis o alguna infección al riñón”, comentó, revelando que el resultado arrojó esta última opción.

Gissella Gallardo descartó la opción de hospitalizarse, pues quería estar con su padre en el día de su cumpleaños, sobre todo porque él está complicado de salud, debido a un cáncer.

Este lunes, la madre de tres hijos agradeció todas las muestras de cariño y mensajes, deseándole una pronta recuperación.

Estado de salud de Gissella Gallardo

No obstante, explicó que no los ha respondido porque “mi ánimo no da para contestarles. De mi salud también estoy mejor”.

“Me di el alta la noche de Año Nuevo, porque mi corazón no podía dejar de estar con mi papá, mis hijos y mi familia.

Gissella Gallardo habló de su estado de salud
Gissella Gallardo | Instagram