El argentino Rodrigo El Potro cantó una vez ‘La mano de Dios’ para alentar a la albiceleste, el grupo Mala Junta alentó a la roja con ‘el chileno de corazón‘ en Francia ’98, y ambas canciones se transformaron en íconos futboleros.
Es por eso que la Tigresa del Oriente no quiso quedarse atrás, y hace algunas semanas lanzó su canción La reina del Mundial para elevar el espíritu de los peruanos, en especial de los jugadores de la selección del Rímac.
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El problema que fue detectado por quienes escucharon la canción -y no así por los productores- es que carecía de rimas, y de afinación; pero bueno, si Bad Bunny puede, ¿Por qué no la cantante peruana?.
En su Instagram, la diva que popularizó los éxitos Nuevo Amanecer y ¡Qué bonito es Israel!, quiso demostrar que es de verdad y que no necesita de tanto artilugio para entonar su apoyo a los jugadores capitaneados por Paolo Guerrero y se aventuró a capela:
El resultado, a todas luces es una oda a la desafinación; pero eso parece no importarle a la Tigresa, ya que aún así mantiene intacta su base de fanáticos. Su energía, vitalidad y sentido del humor son más importantes al parecer, y por eso goza de una popularidad tremenda en redes sociales.
Algunos de los comentarios han sido bastante elocuentes y para todos los gustos: “Qué goles han gritado en el mundial”, “a esta viejita la quiero mucho”, “tiene derecho a hacer lo que quiera”, “lo más grande, y es del Perú”, “en el mundial, Perú ha estado igual de desafinado”.
Según la propia Judith Bustos -alias Tigresa- le han copiado su estilo en un montón de oportunidades, como cuando envió mensajes a Lady Gaga por plagio, y recientemente a Miley Cirus:
