“¿Cuántas veces al día se escribe la palabra ‘porno’ en el buscador de Google?”, se pregunta la actriz de películas para adultos Angela White. Probablemente, millones. Aún así, este famoso buscador no permite que la industria pornográfica compre espacio publicitario, tal como denuncia esta figura junto a otras conocidas estrellas.
Esta industria decidió unir fuerzar para pedirle ayuda a Google, para que así puedan publicitar de manera legal su contenido para adultos, como una estrategia contra la piratería que les está costando millones de dólares al año, tal como detalla el portal BBC Mundo.
“Las grandes compañías comerciales como Google siguen discriminando a la industria para adultos, a pesar de que el mundo está genuinamente interesado en buscar pornografía”, afirmó Angela White.
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La secunda Tasha Reign, propietaria de un estudio y actriz de estas películas. Esta opina que Google “todavía trata a la industria para adultos como un tabú”, agregando que esta situación ha provocado pérdidas en la industria. “Si trabajara con compañías para adultos, Google podría asegurar que el contenido que se ve incluye restricciones de edad, algo que no ocurre con el contenido pirateado”, agregó Reign.
Además de este problema publicitario, esta industria cinematográfica se ha visto afectada por la popularidad de los sitios tipo “tube”: webs que ofrecen videos de manera similar a YouTube y cuya gran mayoría se dedica a difundir contenidos de alto calibre sexual… y conseguido por las malas.
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“Lo que no ayuda es que los consumidores no puedan encontrar los sitios (legales) porque están en la página número 10, después de un centenar de enlaces a los sitios pirata más ofensivos del mundo”, explica Nate Glass, quien dirige la compañía anti piratería Takedown Piracy.
Desde la compañía se negaron a dar respuestas. Como explica este portal “una de las grandes preocupaciones es que los niños puedan acceder a contenidos pornográficos, algo que ha sido el motor detrás de la petición en Reino Unido de barreras de restricción por edad en todos los sitios para adultos”.
