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EFE
Alejandro Sanz enfrenta fuerte acusación de Ivet Playà por relación íntima y sexual cuando ella tenía 18 y él 49 años. Sanz respondió en Instagram negando acusaciones y rechazando participar en prácticas cuestionables. En medio del escándalo, su hija, Manuela Sánchez, mostró apoyo con emotiva foto en redes sociales.
Desarrollado por Bío Bío ComunicacionesEstos últimos días, Alejandro Sanz ha hecho noticias no por su música ni por su gira, sino por una fuerte acusación iniciada por Ivet Playà.
La joven catalana encendió la controversia al hablar de la "terrible pesadilla" vivida junto al artista y de una relación que la hizo sentir "engañada, utilizada, humillada y sucia".
Según ella, el vínculo comenzó cuando tenía 18 años y él 49 y fue algo íntimo y sexual.
Sanz respondió a través de sus historias de Instagram: "Ivet, yo tenía un recuerdo muy bonito de nosotros dos, personas adultas compartiendo su cariño, siendo libres. Qué pena que este sentimiento se haya roto ahora".
Además, mencionó que un mes antes de la denuncia, la Ivet le propuso invertir en negocios familiares, lo que él rechazó. "Siento que tu reacción sea esta. Nunca he sido partícipe de estas prácticas y así seguiré toda mi vida", aseguró.
En medio del escándalo, Manuela Sánchez, fruto de la relación entre Alejandro Sanz y Jaydy Michel, sorprendió al romper el silencio a través de sus redes sociales.
Si bien la joven no suele exponerse públicamente ni participar en polémicas, decidió expresarse justo cuando la imagen de su padre era más cuestionada.
Manuela mostró una foto donde aparece la mano del cantante entrelazada con la de ella, junto a una sola palabra: "Siempre".
