Un escándalo nacional ocasionó el funeral de Bernardino Piñera, arzobispo emérito de La Serena y tío del presidente Sebastián Piñera.
En la instancia, a petición del mandatario, se abrió el ataúd para que él y sus familiares vieran el cuerpo. En el lugar se reunieron más de 30 personas, entre ellos, un grupo musical que amenizó la ceremonia.
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Como era de esperarse, el hecho provocó duras críticas y se acusó al Presidente y su familia de vulnerar el protocolo de funerales en medio de la pandemia.
Este lunes, en Aquí Somos Todos, Ángeles Araya y Francisco Saavedra le consultaron a la Dra. Carolina Herrera sobre el protocolo y lo que debió cumplirse en la ceremonia de Bernardino Piñera.
“Una persona muy anciana (Piñera tenía 104 años) que acaba de ser dada de alta por una infección por coronavirus y fallece, fallece de coronavirus… Créanme, no hay dos lecturas al respecto”, expresó la doctora.
Recordemos que primeramente se informó que Bernardino no murió a causa de la enfermedad, sin embargo, su certificado de defunción confirmó que fue neumonía por COVID-19. De hecho, el Presidente en su discurso durante el funeral lo señala.
Luego, sobre el funeral, Herrera señaló que “lo que correspondía era colocarlo (el cuerpo) con todas las medidas de precaución, sellar la urna y enterrarlo de esa forma. Eso es lo que se hace en los hospitales y es lo que debió haber ocurrido”, teniendo o no la certeza de que estaba contagiado.
Además, la doctora también destacó que se debe respetar la cantidad de personas que se pueden reunir en el lugar, la que de acuerdo al protocolo vigente es de un máximo de 20. Esto no ocurrió en el funeral del arzobispo emérito, pues eran 31.
Por último, respecto a la total protección que, aparentemente, otorga el vidrio del ataúd —el cual defendió la subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza— la doctora señaló que “no se puede asegurar que esto sea así en el 100% de los casos, por eso la recomendación es tener la urna sellada”.
