Para muchos televidentes que siguen Mucho Gusto es conocido, pues han sido deleitados con su baile. Se trata de Camilo Osses, integrante de la Generación 2016 que destaca cada vez que se presenta en el programa.
El niño de 11 años llegó al espacio en enero, cuando el matinal llegó hasta una piscina de Puente Alto, en la región Metropolitana, para hacer un casting. Allí se presentaron varios pequeños, pero él sobresalió y quedó.
La madre de Camilo, Fany Riveros, comentó en entrevista con Página 7 que “un día comenzaron a hablar de que todos eran apitutados, entonces el programa iba a empezar a buscar a niños talentos en las piscinas de acá de Santiago. La primera a la que fueron fue la de Puente Alto. Llamaron a un casting y llevé a mi niño a bailar y quedó seleccionado”.
Posteriormente, tuvo que volver a la piscina pues el programa transmitiría una parte desde allá y en esa oportunidad seleccionaron a tres niños y a cada uno le pusieron un tema distinto.
“A Camilo le tocó un tipo cumbia. Como anécdota, él no quería ir a bailar cumbia y se puso a llorar. Hizo show, porque él dijo que no sabía bailarla y al final lo convencimos y fue igual”, contó su madre, quien le aconsejó que bailara lo que sintiera. “Él fue, bailó en su estilo”, agregó.
Camilo gustó y fue seleccionado para integrar la Generación 2016, donde está desde el verano. Incluso viajó a Viña del Mar con el programa, en la época del festival. También estuvo en vacaciones de invierno donde hasta le celebraron el cumpleaños en el matinal ¡Incluso tiene hasta un club de fans!
La semana pasada regresó al programa, donde demuestra en cada baile que eso es lo que más disfruta. Probablemente volverá a estar todo el verano, según nos contó su madre.
Pero su gusto no comenzó ahora, sino hace años. Según Fany, desde los 6 años participa en competencias y ¡Hasta trofeo al bailarín revelación tiene!
Es tanto su amor por el baile que sus padres lo inscribieron en la escuela de los Power Peralta que abrió en La Florida, pero su madre piensa en no llevarlo estos días, o sino la carga será mucha para Camilo, pues en el matinal deben ensayar frecuentemente.
Pero Camilo también ha debido enfrentar crueles comentarios en redes sociales, los que se centran en sus expresiones mientras baila.
No obstante, este pequeño de 11 años se los ha tomado con altura de miras, pues asegura que no tienen nada de malo y les resta importancia. Su familia también le recalca que si es feliz con lo que hace y cómo lo hace, entonces que siga adelante.
Hasta Lucho Jara le ha preguntado por sus expresiones, y él se ha “defendido” argumentando que tiene el baile en la sangre.
¿Qué te parece su madura respuesta?
